Con velas en mano, lágrimas y un profundo agradecimiento, poblanos aguardaron el 2 de enero por lapsos de entre diez y 15 minutos para ingresar al Templo Conventual de Santa Mónica y así visitar al Señor de Las Maravillas, en filas que por momentos superaban las 50 personas formadas sobre la calle 5 de Mayo, en la capital.
De esta manera, para agradecer por haber iniciado el 2022 con salud y trabajo, así como para pedir que la pandemia de covid-19 ya llegue a su fin, la gente esperó en la fila, mientras en los alrededores del centro religioso se mantuvo la venta de todo tipo de escapularios, cirios, medallas y estampas.
"Vengo a agradecer que tengo salud, que gracias a Dios tuve un poco de trabajo al cierre de año, que en 2022 me vaya mejor y tenga un trabajo estable; que la pandemia ya se estanque porque ha estado feo y la gente cumpla porque sigue habiendo quien no usa cubrebocas", dijo la ciudadana Guadalupe Sánchez.
Al ingreso del templo religioso, los ciudadanos cumplieron con todos los protocolos sanitarios para evitar una mayor propagación de covid-19, entre estos, revisar su temperatura con el termómetro instalado en el acceso y colocarse gel antibacterial, además, en el sitio, había trabajadores que pedían la sana distancia entre cada una de las personas.
"Seguimos aquí con mucha salud, somos creyentes y devotos de el Señor de Las Maravillas, hemos venido aquí al templo desde ya muchos años, unos 20 años yo creo que no dejamos de venir", narró Juan Carlos, otro devoto.
Entre las peticiones más recurrentes entre poblanos y algunos turistas al Señor de Las Maravillas se encontraron también que todos sus familiares se mantengan con salud durante el año que acaba de comenzar, además de que se reduzca la crisis económica a causa de la contingencia sanitaria que comenzó en marzo de 2020.
Otros creyentes más como el señor Ernesto Juárez, quien con bastón en mano, pero toda la fe a cuestas, destacaron que cada año visitan este templo y, en su caso, acude con toda su familia o, al menos, su esposa debido a que mantienen una promesa vigente al Señor de Las Maravillas por los milagros concedidos.
Cabe mencionar que aun cuando el Señor de las Maravillas cuenta con tres fiestas anuales, las cuales son el 1 de julio, el Viernes Santo y el tercer viernes de Cuaresma, es común que los feligreses y creyentes lo visiten durante los últimos y primeros días de cada año, ya que buscan agradecerle un año más de vida a esta imagen, una de las más populares en la entidad poblana.
CHM