Pobreza, salarios mínimos y salud, la cruel realidad de los ancianos en Puebla

EDICIÓN FIN DE SEMANA

Puebla es el cuarto estado del país con mayor población de adultos mayores de 65 y más años, que se encuentran en situación de pobreza.

Pobreza, salarios bajos y salud, cruel realidad de ancianos en Puebla | Melanie Torres
Verónica López
Puebla /

Los adultos mayores en la entidad poblana no solo enfrentan una disminución de sus capacidades físicas ante el paso de los años; al mismo tiempo, la mitad de este grupo poblacional vive en pobreza, es decir con alguna carencias; además entre quienes se encuentran en el mercado laboral, 54.6 por ciento gana hasta un salario mínimo.

De acuerdo con información del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), Puebla es el cuarto estado del país con mayor población de adultos mayores de 65 y más años, que se encuentran en situación de pobreza.

El estudio 'Personas adultas mayores en México', evidencia para la toma de decisiones, indica que más de 277 mil personas en este rango de edad enfrentan alguna o más carencias como falta de recursos para adquirir una canasta básica de alimentos, presentan rezago educativo, necesitan de vivienda o no tenían acceso a servicios de salud.

Dentro del territorio poblano, 48.8 por ciento de los adultos mayores enfrentan al menos una carencia, es decir, con algún nivel de pobreza; mientras que, en Oaxaca, 57.6 por ciento se encuentra en la misma situación; en tanto, en Guerrero y en Chiapas, en cada entidad se registra un nivel de 54.8 por ciento.

En el país, el principal problema que presenta el sector poblacional con 65 y más años de edad es el rezago educativo con 46 por ciento, lo que refleja los obstáculos que enfrentan los adultos mayores como la poca disponibilidad de instituciones y programas de enseñanza, así como problemas de accesibilidad física y económica.

De manera adicional, uno de cada cinco adultos mayores no tiene acceso a una alimentación nutritiva y uno de cada 10 carece de espacios de vivienda de calidad, lo que impacta en su calidad de vida.

Respeto a los mayores

Miguel Ángel Corona Jiménez, investigador del Departamento de Ciencias Sociales de la Universidad Iberoamericana Puebla, explicó que, en medio de factores como pobreza, el rezago educativo, el empleo informal, los bajos salarios, limitado acceso a servicios de salud, los adultos mayores se enfrentan a otra realidad, que consiste en la falta de reconocimiento y de respeto por parte de diferentes sectores de la sociedad y hasta en su propia familia.

“Al interior de las familias falta mucha educación para entender que el adulto mayor merece respeto y reconocimiento. Debe estar en un lugar no abandonado, no marginado”, explicó el experto, Miguel Ángel Corona.

Falta acceso a salud

El acceso a la salud es otros de los retos que enfrentan las personas de 65 y más años. El problema se agrava al considerar que, en esta etapa de vida, las personas requieren de atención especializada ante diferentes enfermedades y complicaciones.

De acuerdo con el Coneval, 29.4 por ciento de los adultos mayores carece de acceso a servicios de salud; mientras que 20.8 por ciento a la seguridad social.

Miguel Ángel Corona Jiménez, académico de tiempo completo de la institución que forma parte del Sistema Universitario Jesuita, explicó que los ancianos, tras dar su vida realizando diferentes actividades, en muchos casos se encuentran enfermos y requieren de atención médica especializada y cada día son más vulnerables.

“Estamos hablando de adultos mayores que han dejado años en la vida productiva. El cuerpo, el físico se va desgastando con el tiempo, no necesariamente con enfermedades, el tiempo va debilitando y haciendo vulnerables los cuerpos de los adultos mayores, mala alimentación, presiones. Ahí está otro gran reto, porque requieren de una atención médica especializada, geriatras y, además, necesitan se auxiliados con otras especialidades para que les dé una atención más cuidadosa”, agregó.

Dentro del estado de Puebla, la pirámide poblacional comienza a invertirse, es decir, está creciendo la población adulta mayor y está disminuyendo la cifra de adolescentes y jóvenes. En la entidad, 11.3 por ciento de la población en el estado es adulta mayor y las proyecciones del Consejo Estatal de Población (Coespo) revelan que para el año 2050 representarán el 21 por ciento del total de los habitantes.

El estudio “El Envejecimiento en la Sociedad Poblana: Perfil Sociodemográfico de Adultos Mayores”, realizado por Coespo muestra que en el año 2010 se tenía una población adulta mayor de 60 a 85 y más años de 514 mil 436 personas; mientras que para el año 2020, dicha población se estimó en 745 mil 419 personas, por lo tanto, se registra un aumento de 31 por ciento en diez años.

En entrevista, Miguel Ángel Corona Jiménez destacó que la composición de la población está cambiando y, cada día es mayor la cantidad de personas de 65 años y más que requiere atención a la salud, social y económica.

“Cada vez hay más personas con mayor edad y, en los próximos cinco años van a ser mucho más. Hemos descuidado el estar preparados para esta etapa que viene de mayor envejecimiento. De ahí que es muy importante tener el panorama económico, pero también aspectos culturales, sociales y de educación, porque al adulto mayor no solamente se le debe estar viendo para que reciba jubilaciones, pensión, sino para que también reciba un trato justo, una inclusión, reconocimiento y respeto”, comentó.

Además, en Puebla, 932 mil 934 personas tienen 60 años y más, de ellas, trabajan 343 mil 234, es decir, 36.8 por ciento. Del total de adultos mayores ocupados, tres de cada cinco laboran de manera independiente.

Los datos corresponden al primer trimestre de 2024, de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE).

Por su parte, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), ubicó a la entidad entre los cuatro estados con mayor población de adultos mayores que trabajan, ya sea por la necesidad de un ingreso, la falta de apoyo de los familiares o la necesidad de mantenerse activos.

De manera adicional, la población que trabaja creció 3.0 por ciento con relación a los 333 mil 347 adultos de 60 años o más que se encontraban ocupados al primer semestre de 2023.

La realidad por parte de quienes se encuentran ocupados en alguna actividad económica representa bajos salarios y, en algunos casos, falta de acceso a prestaciones económicas o la protección de salud.

Finalmente, la ENOE reveló que 54.6 por ciento de los adultos mayores gana hasta un salario mínimo; mientras que 35 mil 470 no reciben ningún tipo de ingresos por las actividades que realizan. La mayor parte de personas de más de 60 años desempeña actividades relacionadas con el comercio, seguida de labores del campo y la industria, en menor medida.

AAC

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