La presa de Valle de Bravo se encuentra a sólo 22 por ciento de su capacidad por la presencia de varios terratenientes que se quedan con el agua, para tener sus propios lagos, afectando el abastecimiento del vital líquido a la población de la Ciudad de México y toda la zona conurbada, denunció el diputado David Parra Sánchez.
“La presa de Valle de Bravo está siendo atajada por los terratenientes que han hecho lagos en sus domicilios y por ello mucha del agua se está quedando ahí, ya no está corriendo a la presa, donde solo tenemos 22 por ciento, cuando debería estar por lo menos al 60 por ciento” aseveró.
El legislador pidió a la quienes integran la comisión de recursos acuiferos ir a la zona para revisar de manera directa este tema, porque las afectaciones son muy graves y a este paso en un par de años va a desaparecer la presa que forma parte del sistema de agua más importante del país.
Durante el Foro “Rescate de la Cuenca de la Presa Madín”, el legislador indicó que Naucalpan tiene ocho presas, pero todas están sucias. Con ellas se podría surtir de agua a toda la región, pero no se puso atención al problema de contaminación y hoy todos los cuerpos de agua están contaminados.
Hace 30 años, aseveró, un presidente municipal limpió la presa, puso plantas tratadoras, entre otras acciones que se dejaron perder. Además hace falta recuperar los bosques cercanos para favorecer el proceso de filtración del agua pluvial.
Eduardo Espinoza Medel, integrante de la Comisión de Cuenca, advirtió que todos los mantos acuíferos del Valle de México se encuentra sobre explotado y ya tienen un déficit de miles de millones de metros cúbicos de agua. También señaló que todavía existe gente que recorre 20 kilómetros para encontrar este recurso, otras que sólo ven pasar el líquido, sin tener servicio.
Los asistentes al foro pidieron pasar del discurso a los hechos y se inviertan los recursos necesarios para atender a la presa Madin, luego de conocer las condiciones que tiene este cuerpo de agua, así como los bosques aledaños.
El conferencista advirtió que para el año 2033 aumentará un grado la temperatura, lo cual ocasionará un decremento de 5 por ciento de producción de agua, afectando en sobre manera al Estado de México, la entidad más poblada del país que demanda más agua.
Hay municipios, dijo, que dependen del exterior, como es el caso de Atizapán y Naucalpan que reciben 80 por ciento de su líquido del Sistema Cutzamala, donde los pozos ya se están secando, por lo cual es necesario proteger todas las zonas de recarga de los acuíferos para hacer más durarero este recurso.
El diputado Max Correa dijo que la Legislatura revisará el marco legal, destinará recursos especiales para este tema, además de continuar con los exhortos que han emitido en los últimos meses, tomando en cuenta las recomendaciones de los expertos.
BAFG