Con un 25 por ciento de su capacidad, al día de hoy 19 de mayo de 2023, la presa El Palote en la ciudad de León, enfrente uno de los niveles más bajos que ha tenido en los últimos 10 años. Ello debido a factores como el cambio climático y la falta de lluvias que este ha generado, así como el hecho de que León es la segunda ciudad a nivel nacional con mayor estrés hídrico.
Dado que esta importante fuente de agua, además de ser un referente de la ciudad y suministro del vital líquido a colonias de los alrededores, el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de León (SAPAL), ya trabaja en un plan maestro que se espera poner en marcha a mediados del 2024, con el cual se verterá agua tratada en el arroyo de 'La Patiña', que a su vez escurrirá a la Presa del Palote.
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El primer paso de este plan, consiste en que el agua residual es saneada en las plantas de tratamiento y pulimento (dentro de la PTARM) Las Joyas y Avelín, para llegar a cumplir con la NOM-003- SEMARNAT-1997, que establece los límites máximos permisibles de contaminantes para las aguas residuales tratadas que se reúsen en servicios al público.
Posteriormente y ya con la calidad suficiente para descargar en cuerpos de agua superficiales, el agua sería bombeada y vertida al arroyo La Patiña, por lo que a su vez llegaría por escurrimiento a la presa El Palote.
En la presa El Palote, está agua se diluiría con agua de lluvia.
Finalmente, una vez diluida, pasaría a la planta potabilizadora El Palote, donde sería tratada con nanotecnología, para que cumpla con la NOM-127-SSA1-2021, que establece los límites permisibles de calidad que debe cumplir el agua para uso y consumo humano. Toda esta agua, sería distribuida para consumo humano en la zona norte de León.
Actualmente, esta propuesta es revisada por la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
MLMG