La necesidad económica, los problemas con bancos y falta de apoyos, han orillado a los ciudadanos de Cuautlancingo a caer en la falsa promesa de “préstamos sencillos”, con cuotas mínimas que día con día, tienen a un grupo de presuntos “colombianos”, cobrando cuotas continuas a comerciantes que poco a poco, caen en el cobro de piso y extorsión, todo a la vista de las autoridades.
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Desde hace varios meses, según los comerciantes de la zona, en Cuautlancingo ha regresado la famosa banda de “Los Colombianos”, hombres y mujeres aparentemente extranjeros que ofrecen “préstamos personales a comerciantes” donde se otorgan créditos desde los mil pesos con pagos diarios de 60 pesos, sin límites de préstamo y con “cómodas tazas de cobro”.
Sin embargo, el terror comienza cuando algún locatario pide un préstamos mayor a los 2 mil 500 pesos, pues según los testigos, los cobradores hacen hasta lo imposible para que se eleven los pagos, las cuotas y la deuda, al grado de buscar apropiarse de mercancía o hasta un negocio completo a través de la extorsión.
“Aquí han pasado siempre, han pasado, pero quedamos con los vecinos, saben que, no se metan con los colombianos, no por mil pesos o diez mil pesos, es una deuda que jamás te vas a quitar y así empiezan después a pedir derecho de piso. Entonces, nos pusimos de acuerdo en que nada con los colombianos, cero”, la mala fama de esta banda los persigue, pero la falta de otros recursos de crédito y problemas en las ventas diarias, orillan a los ciudadanos a caer en esta forma de estafa.
Las autoridades saben lo que aquí ocurre, según los ciudadanos, incluso algunos oficiales llegan a ser clientes de la banda en cuestión.
“Usan también a las colombianas, sus mujeres atienden negocios de comida, jugos, uñas y te hablan bonito, de a poco te sacan información y después te abordan sus parejas, hasta los policías caen, todos en algún momento tenemos necesidad y urgencia”, señalan de forma anónima los ciudadanos.
Sin embargo, esta no es la única manera en que los civiles se ven acorralados por la inseguridad, pues la llegada de este grupo delincuencial y otros locales, han permeado en el incremento de otros ilícitos. Por ejemplo, durante este periodo de enero a agosto, Cuautlancingo tuvo un aumento del 10 por ciento en crímenes como el fraude y daño en propiedad ajena; además subió la incidencia delictiva, se duplicaron los casos de abuso de confianza y hasta la fecha se han registrado un total de 118 casos de robo a negocios, 99 de ellos cometidos con violencia, así lo muestra el portal de Incidencia Delictiva de la Fiscalía General del Estado.
CHM