En medio de montañas y dos ríos, hace más de 600 años un volcán hizo erupción, en el municipio de Texcoco, el agua que corre en el Río Magdalena y el Río Coxcacoaco enfrió la lava que emanó de ese coloso y la convirtió en enormes piedras con una simetría casi perfecta, hoy conocidas como Prismas Basalticos.
El lugar pertenece a la federación, sin embargo, uno de los caminos para llegar a él es predio privado y la familia Espinoza ha preservado el sitio a fin de mantenerlo y preservarlo, así que crearon “El Santuario de Don Manuel”, un sitio que gracias a los cuidados del entorno ha sido elegido por luciérnagas y Mariposas Monarca para su reproducción.
“Estos dos ríos comenzaron a enfriar esa lava y dependiendo de qué tan rápido se enfríe se puede convertir en cristal o en roca, como podemos observar aquí son rocas, y por su forma se les llama prismas basalticos”, aseguró Juan Manuel Espinoza, encargado del Santuario de Don Manuel.
Pocas personas saben de la riqueza que albergan las montañas texcocanas, “las muelitas” así llamaron a los prismas por su forma, pero muchos desconocen la historia que aquel volcán les heredó.
“La mayoría de las personas no los conoce, no sabe de su existencia, en Texcoco hay mucha riqueza, pero lamentablemente no es cuidada ni protegida, tanto por las autoridades, ni por los habitantes, que somos quienes debemos cuidar y exigir que sean resguardados, un ejemplo claro es el descuido en el que se encuentra la zona arqueológica de Tetzcotzinco”, agregó.
Luciérnagas y monarcas lo eligieron para su reproducción
En las hectáreas que pertenecen a don Manuel, se abona con frecuencia, siembran diversos frutos, plantas y árboles que les permiten preservar el área verde, con ayuda de investigadores de la Universidad Autónoma Chapingo don Manuel y su familia han mejorado el entorno y un proyecto que comenzó por el amor a la naturaleza les rindió frutos inexplicables.
Hace tres años se percataron de la llegada de mariposas monarca, después las luciérnagas, dos animales en peligro de extinción que buscan zonas específicas para reproducirse.
“Aquí en la zona prácticamente ya no había luciérnagas y el señor Manuel comenzó a trabajar con este proyecto desde hace 3 años, el año pasado apenas se tuvo el primer avistamiento nutrido”, agregó.
A nivel mundial se estima que hay 2 mil especies de luciérnagas, de las que en México existen 200 y en el Santuario de Don Manuel se han visto una de las especies más grande.
“Ahorita ponen los huevecillos prácticamente todo el invierno están ahí y en el mes de marzo comienzan a eclosionar y comienzan a alimentarse y en el mes de junio que es cuando empieza su reproducción lo único que salen a hacer ahorita es a reproducirse ya no comen, ya no necesitan agua y ya no necesita nada más que reproducirse”, explicó.
¿Cómo llegar?
Este lugar incomparable se encuentra a menos de 30 minutos del centro de Texcoco, al tiempo que al llegar al Santuario los visitantes tienen que caminar aproximadamente unos 100 metros para admirar la mariposa monarca y las luciérnagas, según la temporada.
Además, el sitio tiene miradores desde los que es posible observar los prismas y a otros 300 metros más se puede llegar al centro de lo que un día fue el cráter de un volcán.
Por solo 50 pesos, los guías ofrecen un recorrido con explicación, la zona es delimitada y aunque es poco conocida también ha recibido visitantes de otros países.
Últimamente nos han llegado visitantes de Colombia, de Perú, de Chile, de Venezuela, todo lo que es Sudamérica y también nos han visitado de Francia, de Italia y de Indonesia, entonces gente muy importante que se van muy agradecidos de ver esto.
KVS