En la Central de Abasto de la Ciudad de México, productores de flor de cempasúchil y de calabazas, esperan mejorar sus ventas este año, ya que el pasado, por la pandemia de covid-19 se mantuvieron en números rojos.
Ante ello, desde el quince de octubre, la flor de cempasúchil ya se vende en este mercado –el más grande de Latinoamérica– para adornar las ofrendas.
“El año pasado nos quitaron muchas actividades culturales, por lo que nuestra venta no mejoró, estuvimos casi quebrados. Este año ha sido diferente, por lo que este Día de Muertos, tenemos fe de que las ventas aumenten”, señaló a MILENIO, César Zenil, productor de esta flor.
Foto: César García
Y es que la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) estima que este año exista una derrama económica de 4 mil 826 millones 426 mil pesos, siendo la flor de cempasúchil, la que deja cerca de 100 millones de pesos por su comercialización.
Dentro de esa derrama, también están incluidas actividades turísticas, eventos culturales y venta de consumibles, como es el caso de la calabaza.
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Alma Lobato, quien se dedica a la comercialización de calabaza, espera que su producto tenga éxito en ventas.
Foto: César García
Ella ofrece tres tipos de calabaza: la poblana, que es oscura y viene de San Martín; la de Guanajuato, mejor conocida como calabaza castillo, y la más popular, la americana, que es la más utilizada para decoraciones en Halloween.
“Esta última es la más vendida, sin embargo, el año pasado estuvo flojo. Queremos seguir aportando a nuestras tradiciones”, recalcó.
La flor de cempasúchil así como la calabaza están ya a la venta en la Central de Abasto de la Ciudad de México, en la alicaída Iztapalapa, hasta el 2 de noviembre y disponibles las 24 horas del día.
DMZ