Sentado en una banca afuera del Templo Conventual de Santa Mónica, el señor Marcos León, diagnosticado con cáncer de vejiga, es como espera a su familia después de haber ingresado a este recinto religioso para pedir por su salud al Señor de las Maravillas.
“Lo que pasa es que yo tengo cáncer de vejiga y el Cristo de las Maravillas es muy milagroso, de hecho yo lo visito desde hace, por lo menos, unos 40 años, hubo un tiempo que me quedé sin trabajo y le pedí al Cristo y sí, lo obtuve”, dijo.
Desde hace al menos cuatro décadas, el señor Marcos ha acudido con esta imagen, una de las más veneradas en Puebla, para pedirle milagros para él y su familia, de hecho, recordó que cuando tuvo una mala racha sin empleo, también visitó el templo.
“Ahorita ya hasta me pensioné, pero hoy vine por ese mal que me diagnosticaron, y yo sé que voy a salir adelante, de hecho aquí traigo mi tratamiento en esta mochila, pero ahí vamos, y sobre todo, la fe, la fe de seguir adelante”, añadió Marcos.
Y es que desde temprana hora de este lunes, poblanos acudieron al Templo Conventual de Santa Mónica para visitar al Señor de las Maravillas, esto en la calle 5 de Mayo a donde cada cierre de año asisten devotos a venerar y agradecerle un año más de vida. Pedir por la salud de sus familias en medio de la pandemia de covid-19, poder encontrar empleo y agradecer los milagros concedidos, son algunas de las razones comunes de las personas para visitar este Cristo a fin de año, a escasos días de que comience el 2022.
Con todos los protocolos y medidas sanitarias como la aplicación de gel antibacterial, uso obligatorio de cubrebocas y sana distancia, es como la gente avanzó durante todo el día en la fila de ingreso, para dejar algún arreglo floral y rezar frente a la referida imagen. “Yo creo que lo principal es Dios y sin él no podemos hacer nada, agradecer que estamos un día más aquí, y que sin él no podríamos hacer cualquier cosa, venir a acá, movernos”, agregó Israel, un joven menor de edad, devoto del Señor de las Maravillas.
Otros más, como el señor José Luis, concluyeron que cada año visitan al Señor de las Maravillas y que, en su caso, por una manda (voto de fe o promesa que se hace a Dios o algún santo) de su esposa, acuden cada que pueden a este templo. "Así es, cada año venimos, venimos el día de su cumpleaños del Señor de las Maravillas".
AFM