De imponentes rascacielos, frondosos camellones, glorietas y múltiples monumentos, Paseo de la Reforma se ha consolidado a través de los años como la avenida más emblemática de la Ciudad de México.
Imperdible para turistas y una vía de comunicación importante para las y los capitalinos, la historia de la avenida se remonta al Segundo Imperio Mexicano y a un peculiar matrimonio que buscó gobernar el país: Maximiliano de Habsburgo y Carlota Amalia de Bélgica.
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Con 12 kilómetros de extensión, en sus inicios el proyecto de urbanismo más ambicioso de la época conectaba al Bosque de Chapultepec con otras vías de acceso al Zócalo, no obstante, actualmente también cuenta con dos extensiones que van hacia Tlatelolco y una más que continúa por Polanco hasta llegar a la zona de Cuajimalpa y Santa Fe.
La ubicación geográfica e importantes vestigios de distintas épocas que conforman Paseo de la Reforma han convertido a la avenida en el epicentro de distintas manifestaciones, celebraciones populares, conciertos y actividades cívicas. No obstante, distintos puntos también se han convertido en el escenario ideal para evidenciar algunas de las problemáticas sociales y trágicos episodios que han azotado a México.
Y es que, ante la omisión de autoridades e impunidad de los procesos judiciales, el clamor por la justicia se ha avivado en distintos sectores de la población que han recurrido a sitios de gran afluencia con la intención de que su voz sea escuchada y las víctimas recordadas.
Antimonumentos: la resistencia ante el olvido
De acuerdo con la licenciada en artes visuales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Rosa Maribel Rosjas Cuevas, las identidades que forman parte de América Latina -y en particular en México- se han adaptado a un nuevo modelo que intenta sobrevivir y dejar de ser excluida de la cultura dominante.
"Los significados y simbolismos que forman parte de su memoria colectiva y a la vez de su identidad social son validadas a través del Estado y de los poderes públicos en el orden de la cultura", puntualizó la académica en un artículo publicado en la Revista de la Facultad de Artes y Diseño plantel Taxco.
Algunas minorías se han hecho notar a través de actos simbólicos y objetos de significación cuyo objetivo es evidenciar sus problemáticas y, con ello, transformar acciones y estrategias que persiguen las políticas públicas del Estado en beneficio de la sociedad civil.
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La cultura funciona como un aparato ideológico en el que un conjunto de personas comparten valores, creencias e ideas, por lo que cualquier forma de representación utilizada para manifestarla constituye una nueva política cultural frente a las limitaciones del Estado.
Un claro ejemplo de esas manifestaciones culturales son los llamados antimonumentos, los cuales son definidos como estructuras que desafían el espacio público para intervenir la realidad con la construcción de una memoria constante sobre alguna problemática social.
"Lo más importante de los memoriales y antimonumentos es crear una memoria colectiva, para que la sociedad no se olvide de estos hechos 'que nos sucedieron y nos siguen sucediendo'", citó la autora a Elia Orrantia, presidenta de la asociación civil Sin Violencia.
¿Cuáles son los antimonumentos de Paseo de la Reforma y qué representan?
GUARDERÍA ABC
Recorriendo la avenida desde el Bosque de Chapultepec hacia la zona centro es posible apreciar antimonumentos que fueron colocados en distintos momentos de la historia de México pero todos con una misma exigencia: justicia.
Frente a las oficinas centrales del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) una estructura con el número 49 y las primeras tres letras del abecedario se erige para recordar la tragedia de la Guardería ABC.
Fue el 5 de junio de 2009 cuando en la ciudad de Hermosillo, Sonora un incendio consumió una estancia infantil que dejó como saldo 49 menores muertos y más de un centenar de lesionados.
El inmueble era una bodega habilitada que compartía muro con un almacén de la Secretaría de Hacienda estatal, la cual era utilizada para guardar placas vehiculares y grandes cantidades de documentos. Fue en ese sitio en donde inició el fuego y se extendió rápidamente hasta la guardería debido a que el techo tenía un recubrimiento de poliuterano y un toldo de plástico.
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La negligencia fue la protagonista de esta tragedia, pues si bien la Guardería ABC funcionaba bajo el esquema de subrogación del IMSS, la estancia no contaba requisitos básicos de protección civil como detectores de humo, salidas de emergencia o extintores.
PASTA DE CONCHOS
Frente a la antigua Glorieta de la Palma -hoy de El Ahuehuete- el número 65+ en color rojo recuerda a transeúntes y automovilistas una de las tragedias más sensibles para el pueblo de México pero sobre todo para el sector minero.
El 19 de febrero de 2006, en la mina 8 de la Unidad Pasta de Conchos ubicada en el municipio de San Juan de Sabinas en Coahuila se registró una explosión derivada de una acumulación de gas metano que se acrecentó por las condiciones deplorables de seguridad del centro de trabajo.
La mina era propiedad de la empresa Grupo México, la cual preside German Larrea -considerado como el segundo hombre más rico de México-, no obstante y pese al perfil del dueño, las decadentes condiciones dejaron con múltiples quemaduras a 11 trabajadores mientras que 65 mineros fallecieron.
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Desde el año 2000, el lugar ya había tenido reportes de violaciones directas a la norma de seguridad e higiene, además de que en abril de 2007 Grupo México suspendió las labores para la recuperación de cuerpos. La injerencia del gobierno de Felipe Calderón blindó a la millonaria empresa de cualquier sanción penal, económica y de concesiones, por lo que a más de una década la exigencia de justicia continua latente.
LA RESIGNIFICACIÓN DE LA GLORIETA DE LA PALMA
Durante los primeros meses de 2022, el Gobierno de la Ciudad de México anunció el adiós de la histórica Palmaque durante décadas se situó en una de las glorietas más importantes de Paseo de la Reforma.
La imponente palma sufrió una infección con hongos que poco a poco fue deteriorando su estado, por lo que el gobierno capitalino optó por remplazarla por un nuevo ejemplar elegido por la ciudadanía a través de una encuesta.
Mientras se decidía qué ejemplar sería el encargado de suplir a la palma, en mayo de 2022 la cifras del Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas superó los 100 mil casos por lo que activistas y familiares de las víctimas decidieron tomar el espacio para la construcción de un memorial que se recuerde sus nombres, rostros y existencia.
Meses más tarde, se dio a conocer que sería un Ahuehete el ejemplar elegido para ocupar el espacio en la glorieta, mismo que fue renombrado por las familias como El Guardián de las y los desaparecidos.
LA GLORIETA DE LAS MUJERES QUE LUCHAN
Durante más de un siglo, la Glorieta de Colón se consideró como la más antigua e importante de Paseo de la Reforma, situación que cambió en septiembre de 2021 cuando diversos grupos de mujeres y colectivas organizadas autonombradas como "Frente Amplio de Mujeres que Luchan" tomaron el espacio.
En un acto de descolonización y resistencia, en el pedestal donde antes se encontraba una estatua de Cristóbal Colón fue colocada una antimonumenta de la figura de una mujer en color morado con el puño izquierdo en alto.
En los alrededores fueron colocados tendederos de denuncia, así como los rostros de agresores y víctimas de la violencia de género, ese cáncer que se ha esparcido por cada rincón del territorio mexicano.
Pese al reproche de autoridades capitalinas, las activistas -entre las que se encuentran madres buscadoras y de víctimas de feminicidio, periodistas y sobrevivientes- han resistido y han logrado visibilizar su lucha al renombrar el espacio como "La Glorieta de las Mujeres que Luchan".
RESCATEMOS A DAVID Y MIGUEL
El 5 de enero de 2012, los adolescentes David Ramírez y Miguel Ángel Rivera fueron secuestrados cuando viajaban desde la Ciudad de México a Ixtapa Zihuantanejo, en Guerrero.
Tras múltiples llamadas con las personas que privaron de la libertad a ambos jóvenes, las familias de las víctimas pagaron un rescate, sin embargo, nunca volvieron a saber de ellos.
La incertidumbre por conocer su paradero orilló a la madre y hermana de uno de ellos al activismo, a través del cual han logrado recabar datos sobre los secuestradores así como un par de ubicaciones, no obstante, las investigaciones se estancaron.
Para visibilizar su lucha y la pesadilla que decenas de familias viven en México por el secuestro, en Paseo de la Reforma fue colocado un antimonumento llamado "Rescatemos a David y Miguel", el cual no solo recuerda a aquel par de jóvenes sino que también es una exigencia de justicia ante la inoperatividad del Estado.
LOS 43 DESAPARECIDOS DE AYOTZINAPA
La noche del 26 de septiembre de 2014 quedó grabado en la memoria de la sociedad mexicana como uno de los sucesos más dolorosos. Entre balas y corrupción del Ejército Mexicano y autoridades estatales y municipales, se perdió el rastro de 43 jóvenes estudiantes de la Escuela Normal Rural “Isidro Burgos” de Ayotzinapa, Guerrero.
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Aquellos jóvenes se disponían a viajar a la Ciudad de México para participar en la manifestación anual en conmemoración del 2 de octubre, no obstante, su traslado se vio frustrado por la violencia e irrupción de la organización Guerreros Unidos la cual, en complicidad con autoridades, operaba una red de tráfico de drogas a Estados Unidos.
En su afán de esclarecer el caso, la administración del expresidente Enrique Peña Nieto fraguó una “Verdad Histórica” que apuntaba como responsables al grupo delictivo, deslindando de responsabilidades a todos los funcionarios públicos involucrados.
Con la llegada de Andrés Manuel López Obrador a la presidencia, su gobierno se comprometió en llevar ante la justicia a los responsables de la desaparición de los jóvenes, no obstante y aunque se reconoció que fue un crimen de Estado, la justicia sigue sin llegar para los padres de las víctimas, clamor que continúa presente en la avenida más emblemática de la capital mexicana.
LA MASACRE DE MIGRANTES EN TAMAULIPAS
El 22 de agosto de 2010, 72 migrantes fueron asesinados en el estado fronterizo de Tamaulipas a manos del grupo más sanguinario que ha visto nacer México: Los Zetas.
La migración ha sido un problema que durante décadas ha estado presente hasta llegar a consolidarse como uno de los principales problemas a resolver entre México y Estados Unidos.
Y es que, en su afán de alcanzar el llamado "Sueño Americano", miles de migrantes han quedado expuestos a los peligros que su travesía implica, incluyendo el reclutamiento o secuestro por parte de la delincuencia organizada, tal y como sucedió en San Fernando, Tamaulipas.
En honor a las personas en movilidad que fueron asesinadas en aquel trágico episodio y en todas aquellas que murieron con la esperanza de alcanzar una mejor calidad de vida fue colocado otro antimonumento en Paseo de la Reforma.
OTROS ANTIMONUMENTOS EN CDMX
Pese a que las estructuras citadas previamente conforman una “Ruta de la Memoria” a lo largo de Paseo de la Reforma, en zonas aledañas han sido colocados otras esculturas que recuerdan movimientos estudiantiles relevantes como lo fue la “Masacre de Tlatelolco” el 2 de octubre de 1968 o el llamado Halconazo de 1971.
Del mismo modo, en la Avenida Juárez fue colocada una antimonumenta para conmemorar a las víctimas de feminicidio y de la violencia de género en México.
Más allá del esplendor de grandes edificios o estructuras arquitectónicas de Paseo de la Reforma, la avenida cuenta un sinfín de historias que, aunque no sucedieron en la capital mexicana, sí forman parte de la memoria colectiva de una sociedad que se resiste al olvido y que continúa en búsqueda de justicia.
ATJ