Desde antes de las siete de la mañana se observa en calles que convergen al mercado de Ajalpan, el ir y venir de comerciantes cargando racimos de canastas, tenates, ceras, loza, entre otros artículos que forman parte de la plaza grande de Ajalpan que desde hace mas de 200 años se realiza en ese lugar que en esta ocasión reunió a dos mil 500 vendedores.
Es aquí donde converge gente de la Sierra Negra, el Valle y algunas poblaciones de la Mixteca, para abastecerse de artículos y materias primas que ocupan en sus ofrendas el día de muertos.
La plaza grande inicia a las siete de la mañana del martes y termina la noche del miércoles, son 24 horas de permanente movimiento comercial en este tianguis.
Eva Rodríguez, habitante de Ajalpan, dice que quien acude en esta fecha para surtirse además de los enceres para las ofrendas, de especies para preparar el mole que aprendió a preparar desde niña, porque acompañaba a su mamá a surtirse de productos de temporada.
La concentración de comerciantes se da en gran proporción porque no solo hay las compras con dinero en efectivo, también trueque, artesanos que cambian tenates de palma o canastas de carrizo por fruta o aves como guajolotes o gallinas por canastas.
Aquí en este mercado, tienen un espacio las personas que venden incienso, ellas vienen de la Mixteca y son esperadas porque el producto lo extraen de árboles que hay en esa zona, es de olor suave y de humo delgado, nada que ver con el que viene procedente de china o que inclusive se fabrica en México y es artificial.
En esta plaza grande que de acuerdo a crónicas documentadas indican que desde 1750 ya se realizaba y tenía importancia en la región, porque aquí la gente puede comprar sahumerios, cucharas para mole, floreros, una diversidad de chiles, platos, ollas de barro, una variedad de pan de muerto, etcétera.
El alcalde Sergio Sandoval Paniagua, dijo que previo a esta celebración trabajaron áreas de industria y comercio, seguridad pública, transito municipal, entre otras para coordinarse y dar seguridad y servicios a los comerciantes que así como ancestralmente llegaban para seguir con esta tradición de "La Plaza Grande en Ajalpan", hoy la mantienen viva y es única a nivel nacional que tiene estas dimensiones y características, sobre todo porque preserva el trueque, concentra a comerciantes y compradores de municipios aledaños del valle de la sierra y de otros puntos de la república.
CHM