Hace siete años, la muerte de un estudiante en Tamaulipas generó conmoción entre la población del estado, pues el fallecimiento ocurrió cuando fue víctima de bullying de parte de sus compañeros de escuela que lo balancearon y aventaron contra la pared; al perder la vida, su familia decidió donar sus órganos. Recientemente su historia fue retomada en redes sociales para hacer conciencia de la donación y decir que es un héroe.
En mayo del 2014, Héctor era alumno de primer grado de la escuela secundaria 7 "Eleazar Gómez" en Ciudad Victoria. Un día, sus compañeros, sin medir las consecuencias, lo balancearon y arrojaron contra la pared.
- Te recomendamos Mujer acude a pedir empleo, la envían a revisión médica, le detectan tumor y ya no la contratan Comunidad
Héctor, o Janito como también le conocía, sufrió lesiones severas al grado de provocarle muerte cerebral y tras una semana de luchar por su vida, fue declarado muerto.
A pesar del dolor, sus padres decidieron donar los dos riñones de su hijo para igual número de jóvenes que lo necesitaban. El procedimiento quirúrgico se realizó y fue todo un éxito, hoy los dos receptores de los órganos tienen una buena calidad de vida.
¿Qué pasó con los receptores de órganos?
Esta historia fue retomada por el doctor Jorge Salinas Graham, quien ha tenido a su cargo varios trasplantes de órganos en Tamaulipas.
Cuenta que hace unos días fue a renovar su licencia de conducir y como parte del trámite se sigue preguntando a la población si desean ser donantes, lo que para él es una grata situación, pero lo que más le llamó la atención son las fotografías que están colocadas como parte de una campaña para fomentar la donación de órganos.
Entre esas imágenes está una que hace referencia a Héctor.
Dijo que en estos casos siempre se aconseja mantener el anonimato entre la familia donadora y los receptores, pero esta historia fue tan divulgada que no pudo lograrse la secrecía.
Es así que el doctor mostró primero la imagen de aquella niña de 12 años que recibió el riñón en Tamaulipas y cómo se encuentra ahora.
“Lleva una vida perfectamente normal y está estudiando la licenciatura en Enfermería”.
También mostró al joven, que al momento de la donación tenía 19 años, que hoy trabaja como licenciado en Radiología.
“Ambos coincidentemente están dedicando su vida al cuidado de la salud de los demás. Si por coincidencia la familia de Janito llega a ver este video, queremos que sepan que estos dos obsequios que dejó Janito están en el cuerpo de dos personas que valoran y cuidan muchísimo esos riñones. Todo el equipo de trasplantes en Tamaulipas recordamos a Janito como él héroe que es”.
EAS