Resiliencia entre poblanos ante la emergencia por coronavirus

La aplicación de la resiliencia, se observó en la fabricación de artículos para satisfacer las necesidades de la pandemia.

Un obrero sale de su fuente de trabajo en el corredor industrial La Cienega, la entidad aplicó la resiliencia ante el covid-19. (Andrés Lobato)
Jaime Zambrano
Puebla /

En Puebla se apreció la aplicación de la resiliencia ante la emergencia generada por el coronavirus con adaptaciones rápidas en los procesos educativos y con la fabricación de gel sanitario, máscaras, respiradores artificiales, así como en la expansión de los servicios de entrega de alimentos y comestibles.

De acuerdo con Michael William Smith, investigador del Departamento de Ingeniería Industrial y Mecánica de la Universidad de las Américas Puebla (Udlap), que la resiliencia es la capacidad de cambiar el modo de operación para mantener las funciones esenciales a pesar de encontrar situaciones fuera de lo normal.

Durante el webinar denomiado “Ingeniería de resiliencia para adaptarse a nuevos desafíos como el covid-19” organizado por la Udlap, el investigador resaltó que, en la actualidad, la emergencia generada por el coronavirus, desencadenó diferentes complicaciones.


“En la actualidad, un problema de software en Alemania afecta la fabricación de automóviles en Puebla; una pelea entre Rusia y Arabia Saudita significa que México pierde mucho dinero por el efecto de los precios del petróleo. Toda esta complejidad significa que es difícil predecir las formas en que el sistema puede estar expuestos a tensiones o condiciones nuevas, lo que lleva a incertidumbre e imprevisibilidad introducidos en el sistema”, comentó.

Resaltó que en estados como Puebla y, en general, en todo México existen muestras de que la población aplicó la resiliencia en la respuesta para enfrentar la emergencia generada por el coronavirus.

“La aplicación de la resiliencia en la respuesta de México se vio en adaptaciones rápidas en la fabricación para satisfacer las necesidades de la pandemia para fabricar gel sanitario, máscaras, respiradores artificiales, así como la rápida expansión de entrega de alimentos y comestibles y brindar educación en línea”, explicó el investigador.

Por su parte, José Orlando Gomes, académico del Departamento de Ingeniería Industrial de la Universidad Federal de Río de Janeiro, explicó que desde las instituciones de educación superior, se puede impulsar la resiliencia en la sociedad.

“En Brasil, por ejemplo, se puso en marcha un proyecto que estamos haciendo con varias universidades y países que integran el BRIC, en el que cada universidad de cada país está trabajando para recolectar datos que ayuden a dar respuestas al covid-19 y comprender su proceso”, comentó.

Señaló que la aplicación de la resiliencia se apreció en diferentes respuestas que se pusieron en marcha en países como Corea del Sur, Argentina y Alemania ante la contingencia sanitaria y los problemas económicos relacionados.

“Actuar temprano y apostar agresivamente, como lo hizo Corea del Sur, Argentina, Alemania; apuesta a densidad, como lo realizó el estado de Texas; apuesta por supuesto natural, como en Suecia que pagó un precio altísimo ya que tiene relativamente el mismo número de muertos que Estados Unidos. Es un modo de responder o no responder a la pandemia y que se refiere a que minimiza cualquier impacto en mí, porque apuesto a que mi riesgo es bajo”, explicó.


LEE

LAS MÁS VISTAS