Luego de más de seis horas de incertidumbre burocrática, el primer matrimonio de pareja del mismo sexo se concretó en la entidad en la Oficialía 1 de la dirección del Registro Civil de Nuevo León, sin necesidad de amparo.
Por tal motivo, Janeth Oliva y Amatzú Aranda, que desde las 15:00 esperaban formalizar legalmente su relación, recibieron su acta de matrimonio pasadas las 21:00, y pasaron a la historia del estado como la primera pareja de la comunidad LGBTI que recibe tal documento oficial por parte de las autoridades del Estado.
Cabe destacar que mientras las dos mujeres esperaban se les entregara su acta correspondiente, recibieron una llamada de Julio González, director de enlace y prensa del Gobierno del Estado, y en cuya representación del gobernador Jaime Rodríguez Calderón las invitó a una cena para festejar su unión matrimonial.
“Felicitarlos por su enlace, por instrucciones del gobernador, invitarlos a una cena y celebrar su enlace, es de parte del ingeniero Jaime Rodríguez Calderón”, expresó en llamada telefónica el funcionario estatal.
De acuerdo con Mario Rodríguez Platas, activista y miembro del Movimiento por la Igualdad en Nuevo León, el matrimonio se pudo concretar este día, y no prolongar más la espera, gracias a la intervención de la Secretaría de gobierno de Nuevo León.
“Aquí el que vino a destrabar todo fue Gabriel Deschamps y Manuel González”, comentó quien ha luchado por la legalización de este tipo de matrimonios por más de 15 años.
Por su parte, la diputada de Morena, Claudia Tapia, que se hizo presente en la Oficialía 1 en San Nicolás, gritó eufórica, “lo logramos”, y dedicó el éxito a la gente que se quedó en el camino durante la lucha por hacer válido este derecho humano.
Otra de las intervenciones claves durante el proceso corrió a cargo de Pablo Rojas Durán, director del Instituto de Derechos Humanos de la CEDH, el cual presentó diversas expectativas para llevar a cabo el matrimonio, y quien acompañó a Janeth y Amatzú en la defensa de sus derechos en todo momento.
Cabe destacar que el histórico primer matrimonio igualitario en Nuevo León, sin amparo, no se pudo concretar a la hora señalada, debido a la falta de un documento donde constara que el Congreso del Estado ya había sido notificado de la resolución tomada por la Suprema Corte de Justicia de la Nación hace un par de semanas.
Pasadas las tres de la tarde, y de acuerdo con el subsecretario de asuntos jurídicos del Gobierno del Estado, Homero Cantú, para poder dar seguimiento al matrimonio de Janeth y Amatzú, y a todos los matrimonios que soliciten las parejas del mismo sexo, necesitaban una constancia por parte del Poder Legislativo.
“Nosotros no tenemos constancia oficial de que haya sido notificado el Congreso, y eso lo tenemos que tener para que en nuestro expediente aparezca esa constancia y podamos celebrar esos matrimonios”, señaló el funcionario estatal en llamada telefónica pública a la activista Jennifer Aguayo.
Luego apareció en escena Fernando Marín, director del Registro Civil de Nuevo León, el cual, tras presentar un escrito en el Congreso del Estado, se dedicó a atender a la pareja, pero en especial a los activistas, medios de comunicación y derechos humanos, su misión, expresó, era ver “el como sí” de este enlace.
Algo que pasadas las nueve de la noche, a las 21:08, y ante la alegría de activistas, oficial del registro civil, y la felicidad y llanto de la histórica pareja, se cumplió y concretó en la entidad: el primer matrimonio igualitario en Nuevo León de manera oficial y sin amparo de por medio, "las declaro unidas en legítimo matrimonio", precisó la oficial del registro civil.