En 2023 todos se dicen fotógrafos, con un SmartPhone se tiene la posibilidad de captar momentos únicos; sin embargo, hay negocios profesionales que tienen el reto de agradar a los clientes, a las nuevas generaciones en un mercado competido y acaparado por las redes sociales.
Jenifer Rivas, responsable de Jen Art “Studio Fotográfico”, refiere que ellos han buscado las estrategias de mantenerse vigentes, aunque ahora, las familias ya no se quieran tomar fotos en un estudio como tal vez los abuelos y las anteriores generaciones sí lo hacían.
Cuenta una anécdota sobre paquetes que un ciudadano adquirió en redes, imágenes económicas que resultaron de contratar a una persona que no tenía experiencia, el equipo y tal vez la capacidad de captar un momento inolvidable. Al final, refiere Jeni, la clienta buscó si estudio para hacer un trabajo profesional y poder dejar una imagen en un cuadro, que más tarde fue expuesta en un evento previamente definido.
Lo más reconfortante del caso, es que todo fue a contratiempo, porque en la vida, hay que aprender a resolver problemas y eso hace la diferencia. “Todo mundo quiere vender fotos, nos han tocado casos de personas que ofrecen en el Face, no demeritando el trabajo que ellos hacen, pero hay mucha gente que no tienen esa preparación y dicen a mí se me hace tomar esa foto, entonces dicen voy y hacen la imagen”, sostuvo.
Es un negocio que se encuentra sobre la calle Obregón, en el Centro de Tampico, uno de los pocos estudios que existen en el corazón de la ciudad, cuyos dueños vienen de luchar contra la adversidad, luego de cerrar durante un año completo luego de la afectación por la crisis sanitaria.
Hace un par de generaciones, se habla de 60 o 50 años, era común ver en la sala de los hogares una foto familiar en la sala, en el cuarto principal o en las recamaras, era parte de la decoración en las casas y tal vez ahora solamente se miran en la vivienda de las abuelas.
Sin embargo, a pesar del impacto tecnológico que llegó como avalancha en los últimos 15 años, aún hay familias que quieren que sus integrantes luzcan en un cuadro, el cual puedan presumir todo el tiempo a sus conocidos, pero sobre todo destacar esa unión que debe existir en el núcleo familiar.
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Recuerda: “tuvimos que ampliar nuestro campo para lo que es la fotografía de identificación para documentos oficiales, pasaportes, visas, títulos y nos vimos un poquito mermados en el sentido en que los certificados son digitales”.
Pero ahí se observan las ganas de generar un plus a los clientes en el ámbito de la fotografía.
Otro de los rubros que son opción a la clientela es la restauración de fotografías.
Porque la humedad del puerto en la zona sur hace que las imágenes se desgasten, así que es la forma en que ayudan a mantener recuerdos que incluso han sido heredados por generaciones.
“Cubrimos también lo que son las restauraciones, tenemos muchas fotos antiguas y en Tampico se deterioran en un margen corto, son fotografías que tienen 50 o 60 años que traen porque ya están deterioradas”, recalcó Rivas al respecto.
VLSS