En marzo deben estar listos los resultados de estudios de uso de biosólidos obtenidos de Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) para el mejoramiento del suelo y con ello impulsar la agricultura y reforestación en la entidad, informó la titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Hidalgo (Semarnath), Mónica Mixtega Trejo.
Dichas acciones, apuntó la funcionaria estatal, se desarrollan desde finales del 2023 para verificar la viabilidad y beneficio en el uso de este tipo de residuos en parcelas del municipio de Zempoala, siendo al momento el único con este tipo de intervención en el suelo de cultivo.
“Estamos llevando este trabajo desde noviembre y diciembre del año pasado, estuvimos trabajando en algunos estudios que se tienen que realizar, ya se está ocupando el biosólido en parcelas demostrativas, vamos a ver qué mejoramiento del suelo tienen, porque obviamente cada región es distinta, se tiene que hacer un estudio previo, lo está haciendo el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap)”, manifestó.
Mixtega Trejo comentó sobre la disposición de este biosólido, del cual en el mono-relleno de la PTAR de Atotonilco de Tula se tiene aproximadamente dos mil toneladas, material que se ocuparía en prácticamente todo el estado.
“Para todas las parcelas se podría utilizar y la idea es que no tiene costo, pero sí necesitamos ver los beneficios que le otorga al suelo, es para agricultura y también para el tema forestal, entonces se están haciendo en parcelas demostrativas en forestal como agricultura, ahorita se están haciendo en Zempoala, ahí es donde estamos haciendo las primeras demostraciones”.
La demarcación, añadió la titular de la Semarnath, es la única, al momento, que solicitó integrarse a este programa.
“El trámite es muy sencillo no tiene costo, sin embargo, estamos en espera de las parcelas demostrativas para entonces hacer un programa mucho más amplio y mucho más ambicioso”.
Cabe recordar que desde el mes de agosto se informó sobre el aprovechamiento de las aguas tratadas en el sector agrícola, meta para abatir el impacto negativo al ecosistema, como adelantó Mixtega Trejo, ya que no sólo se puede utilizar para las áreas de temporal y zonas de riego, sino que abate los gases de invernadero que provocan las aguas negras.
Esta labor se desarrolla en la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) en el municipio Atotonilco de Tula, donde se pretende generar al menos dos millones de metros cúbicos de biosólidos que darán un beneficio directo a parcelas de cultivo en las diferentes regiones de la entidad.
Finalmente, en el mes de septiembre el delegado de los Programas para el Bienestar en Hidalgo, Abraham Mendoza Zenteno, reconoció el trabajo conjunto con la Semarnath y Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) en la entidad, así como con el Inifap para ver los beneficios de utilizar estos residuos en el campo, ya que se pretende entregar a los productores hidalguenses este insumo junto con los fertilizantes para mejorar su producción, mejorar la calidad de suelos de parcelas y con ello coadyuvar a que la siembra de productores resista condiciones como sequía.