A pesar de que las autoridades municipales, informaron que habrá un reordenamiento con las sexoserviodoras, y que se les brindará seguridad para que realicen su trabajo, ellas se encuentran a unas calles del Zócalo capitalino, utilizando la ciclovía de la 3 Norte y 4 Poniente para ofrecer su servicio, además, aprovechan la proliferación de los ambulantes para acercarse a la Avenida Reforma.
Durante un recorrido realizado por MULTIMEDIOS Puebla, se observó que el incremento de la presencia de ambulantes en las calles 2 y 4 Poniente, entre la 3 Norte, ha provocado que ofrezcan el servicio a tres calles del Palacio Municipal.
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Por ello, las que están más cerca de Avenida Reforma, son la que se ubican en la 3 Norte y 4 Poniente, y para estar a la vista del cliente, utilizan la infraestructura ciclista y los bolardos para ofrecer los servicios.
En este punto del corazón de la ciudad, se verificó que hay de dos a tres mujeres que se dedican a esta actividad, sentadas en los bolardos de cemento, lo que provoca que estén a la vista de los automovilistas y del peatón, con el objetivo de que sean observadas y contratadas.
En este lugar se contabilizaron entre tres a cinco, otras se instalan en el jardín que está ubicado en la zona, en donde varios hombres llegan al lugar para preguntar el precio del servicio.
Lo mismo ocurre en las calles 12 y 14 Poniente, en estas dos vialidades la presencia de las féminas que se dedican a esta actividad, es más evidente y de mayor número, quienes se colocan afuera de estacionamientos, hoteles, comercios como tiendas de telas o abarrotes y ferreterías.
En el recorrido, se detectó que algunas están de dos en dos y otras por separado.
Al recorrer la calle 12 Poniente, una de las sexoservidoras, estaba concretando su servicio con una persona mayor de 40 años de edad.
En esta vialidad, transitan familias con menores de edad, debido a que hay comercio de diferentes rubros.
En entrevista, Abigail Jiménez señaló que las autoridades municipales tienen que poner orden en el tema, debido a que están a unos pasos del Zócalo capitalino, y a su decir, esto ya no es correcto.
“Debe existir un ordenamiento para que trabajen, ya sea en casonas, hoteles, o hasta en la zona de la calle 90 Poniente, como antes se hacía en otras administraciones, porque sí debe existir una línea más estricta”, enfatizó.
AAC