El maguey pinta las llanuras y los cerros de Singuilucan, específicamente en el Rancho La Gaspareña, un lugar en donde la gente protege a esta planta nativa y que desean devolverle el valor que ha tenido a través de la historia, poniéndola en un jarro de barro para que las visitantes lo tomen en forma de pulque o atole de aguamiel, o en un plato de barro, salpicando su sabor y magia con chilaquiles empulcados, o en un recipiente con mantequilla hecha con pulque, con una sabor único que se queda en el paladar y corazón de cada persona que la pruebe untada en un bolillo recién horneado.
Nueva experiencia turística
Es en este lugar en el que el colectivo Metzalli ha impulsado su proyecto “Experiencia cultural y gastronómica en torno al maguey y el pulque”, en un sitio donde la magia se realiza en una cocina de humo, en el que el chef Roberto Buccio hace magia junto a la cocinera tradicional Martha Jiménez, quienes con una sonrisa, mucho esfuerzo y dedicación, preparan los alimentos que servirán dentro de esta aventura que se disfruta con la vista, el paladar, la vista, el olor y por supuesto, con el corazón, porque es con los ingredientes que da el maguey con los que cocinan cada uno de los platillos que ofrecen a quienes acuden a este proyecto, ubicado a 30 minutos de Pachuca.
“Ésta forma parte de las 365 experiencias en el estado de Hidalgo, entre las 365 experiencias gastronómicas que lo hacen posible el colectivo Metzalli en el rancho la Gaspareña, que es un grupo de gente que protegen el maguey, producen y lo recolectan, pero, además, hay una bióloga una cocina tradicional, hay un chef, un productor y cuidador de magueyes, que nació aquí, que nació entre los magueyes.”
“Lo que se puede vivir en este recorrido turístico, en esta experiencia gastronómica en donde la base es el pulque, y en donde la gente podrá ser partícipe de la extracción, de raspar y degustar todo lo relacionado con esta grandiosa planta, porque no solo se aprecia el paisaje magueyero que tiene Hidalgo, sino se participa en este mismo.También tienen talleres, son varios los que se pueden realizar dirigido a escuelas, empresas turísticas que van de a pie y que quieren vivir algo extraordinario en el estado”, indicó la titular de la Secretaría de Turismo del estado, Elizabeth Quintanar.
Entre los magueyeros
Todo inicia con un desayuno “Despertando con los magueyeros” que consiste en chilaquiles empulcados que se sirven con lechuga, pollo, crema y queso, acompañados con bolillos de la región que pueden degustarse con mantequilla de pulque café de olla y atole de aguamiel.
“Somos el colectivo Metzalli que se conforma en el Rancho La Gaspareña que se dedica a la producción agroecológica de los agaves y todos los derivados y la otra parte de la empresa que es el colectivo Xocoyotl que es una empresa que se dedica al gastro-turismo y turismo rural, por lo que ofrecemos experiencias gastronómicas, culturales entorno al maguey y al pulque además de que talleres gastronómicos en donde dependiendo la época del año pueden venir no solo el público en general, además está orientado a estudiantes de distintas universidad que pueden venir aquí a complementar su educación.Como colectivo llevamos cuatro meses trabajando en el rancho hemos recibido a grupos de diversas universidades del estado de Hidalgo sobre todo de la UAEH, de la escuela superior de Tizayuca, de la Universidad Tecnológica del Valle del Mezquital y de Universidad Activada de Ecatepec, del Estado de México, así como de distintos grupos que han realizado talleres”, indicó Carmen Julia Figueredo Urbina, bióloga del colectivo Metzali de la parte operativa y de investigación, así como la productora de la mantequilla realizada con pulque.
Un recorrido por los llanos en donde las pencas desean abrazar a visitantes; magueyes sanos, fuertes y que crecen, una media docena de perritos que vigilan la zona con entusiasmo, un burro que pasta y un escenario único que se pierde en la memoria de todas aquellas personas que gustan de vivir una nueva aventura natural.
Precios
Para las y los interesados, hay dos paquetes para visitar este lugar: el sencillo que incluye desayuno, los recorridos entre magueyes, visita al tinacal, así como a la cocina de humo, en donde se hace la degustación de los productos derivados del maguey y el pulque y se ofrece la comida, mismo que tiene un costo de 500 pesos por persona.
El segundo paquete, incluye además de las actividades y servicios del primer paquete, un taller gastronómico, “por lo que se tiene la interacción directa con los ingredientes, cocinan con el chef Roberto Buccio y la cocinera tradicional Martha Jiménez, y en el campo se recolecta junto conmigo que soy la bióloga y el productor todos los ingredientes y se llevan a la cocina y se hace la degustación, siendo que éste cuesta mil pesos”, concluyó.