La temperatura durante la madrugada del miércoles marcó menos un grado centígrado y aún así, decenas de personas tuvieron que quedarse al exterior del Hospital de Zona, ubicado en el municipio de Monterrey.
En una especie de túnel en donde hay calefactores, es el lugar en que permanecieron por horas esperando recibir algo de calor, pero eran tantos que el frío no dejaba de sentirse.
Por cada uno había una historia para contar, unas más drásticas que otras.
Como el caso de Saúl Domínguez López, a quien la ruptura de su matrimonio lo llevó a la depresión y a vivir ahí al exterior del nosocomio, sin importar las rachas de viento y bajas temperaturas.
Hace 15 años, en búsqueda del amor dejó Veracruz sin avisarle a sus familiares y el tiempo ha pasado, pero no ha podido contactarlos.
En el hospital también había personas de la tercera edad como doña María, quien acudió luego de tener un accidente en un camión en el municipio de Juárez.
Desde las 19:00 horas se encontraba en el lugar y fue dada de alta pasada la media noche, hora en que ya no hay camiones para poderse regresar a su casa en la colonia Los Cometas.
Por lo que decidió esperarse en dicho sitio hasta que la primera de las unidades pase, eso sí, bien abrigada con un cobertor que les regalaron y bebiendo algo calientito para aguantar el frío.
Cada persona tiene una anécdota que la hace permanecer a la intemperie, sin importar lo helado que pueda llegar a estar.
mrg