En el municipio de Jaumave más de 50 ejidatarios se organizaron para crear grupos de autodefensas, día y noche se turnan para vigilar que no se enciendan un par de bombas o se desvíe el cauce del río Guayalejo por parte de un empresario local.
Pedro César Luna, presidente de la Asociación Canal Común Río Guayalejo, afirmó que en contubernio con la Comisión Nacional del Agua el productor de limón, Arturo Valdés, instaló dos bombas de dónde extrae líquido para regar casi mil hectáreas de sembradío.
En su momento se determinó por parte de la autoridad federal que es totalmente ilegal esta acción, por ello perdió las concesiones sobre el uso y aprovechamiento del líquido pero volvió a recuperarlas a través de un amparo.
“En una parte ahí en El Charco Azul instaló otra bomba que es completamente ilegal y esto no es de ahorita, es de aproximadamente unos cinco o seis años. El agua para el uso de las comunidades pues ya no llegó, pero que llegara agua para que tomaran agua sus animales es una ventaja pero llega un momento en el que ni para eso tienen pues lógico que dijeron pues de qué se trata”.
Los afectados acusaron que también se bloqueó parte del cauce del río Guayalejo con piedras, lo cual tampoco está permitido. La CNA advirtió que tendría que retirarlas pero solo fue momentáneo.
Los ejidatarios ya interpusieron la denuncia ante la Comisión de los Derechos Humanos y ante la Comisión Nacional del Agua, pero hasta el momento nadie los ha apoyado.
“Personal de la CNA dijo que era una ilegalidad pero a él como le falta agua arriba y aquí había suficiente que por supuesto nunca ha sido de él, pues se la llevó, se la robó, esa es la palabra correcta se la robó”.