En Ciudad Madero el 60 por ciento de las instituciones educativas no cuentan con equipo contra incendios, reconoció el director de Protección Civil en la urbe petrolera, Romel Martínez Flores.
Señaló que es una obligación por parte de los directivos de escuelas contar con equipos de seguridad, para estar preparados ante cualquier situación de emergencia. “Debemos de trabajar en conjunto para llevar revisiones al área educativa y apoyarlos y puedan adquirir lo necesario, sobre todo para evitar situaciones. Me atrevo a decir, de un 100 por ciento, solo el 40 tienen un buen equipamiento”, expresó.
Reconoció que las escuelas al no contar con este tipo de medidas, ponen en riesgo a los alumnos y maestros, en caso de registrarse un incendio, pues no tienen las herramientas para actuar de manera inmediata, en tanto llegan las corporaciones y atender el siniestro.
Expuso que son las instituciones de nivel básico las que carecen de equipo contra incendios; guarderías y preescolar cumplen en tiempo y forma; por ello harán una revisión para determinar el número de planteles carentes de equipo.
“Es una obligación; ya hay una normatividad que rige, que toda el área educativa debe de contar con sus equipos, precisamente en cuanto medidas de seguridad se refiere, botiquines, extintores, capacitación, señalética. En el área preescolar, guarderías, cumplieron en tiempo y forma, pero en primaria hace falta reforzamiento de todo”, explicó.
El director de Protección Civil, dijo que trabajarán en coordinación con las autoridades educativas de Madero para atender esta situación lo más rápido posible y con ello evitar tragedias.
Aumenta riesgo en el centro
El riesgo en el centro de Tampico aumenta cada año por lo viejo de los edificios, aseguró la Comisión de Protección Civil, pero no se cuenta con un informe detallado sobre el estatus de las construcciones en mal estado.
Alberto Sánchez Neri, titular de la citada Comisión, expuso “necesitamos tener conocimiento sobre el número de construcciones y los riesgos existentes, porque cada vez es más constante el desprendimiento de cemento”.
Hace apenas un par de días en la calle Aduana, en el centro de la ciudad, un edificio recién remodelado tuvo desprendimiento de revestimiento y eso dejó como saldo a un peatón lesionado de la cabeza al caerle un trozo de ladrillo.
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Una de las zonas más dañadas es la infraestructura de la calle Aduana, sobre todo en los niveles superiores, la calle Pedro J. Méndez y el segundo cuadro, reconoce Evaristo Güitrón Moreno, presidente de Cámara Nacional de Comercio (Canaco).
GINS