El zafarrancho en una guardería de la colonia Los Pinos terminó con la suspensión de labores por parte de la Comisión Estatal para la Protección de Riesgos Sanitarios (Coepris) hasta que se verifiquen los protocolos de operación.
Manuel Ramos Ferreira, representante legal del lugar, detalló que aproximadamente a las 13:30 horas llegaron varios papás a la guardería con la exigencia de ver a sus hijos debido a una serie de rumores que surgieron en redes sociales, por las malas condiciones en las que presuntamente se encontraban sus hijos, sin clima y que el menú de comida no era respetado.
Explicó que primero violentaron la puerta principal y posteriormente llegaron hasta el segundo nivel para tratar de abrir a la fuerza un área donde se encontraban resguardados los infantes, ya que por cuestiones de seguridad y ante el altercado se determinó llevarlos a otra punto.
Indicó que fue uno de los padres quien insistió en abrir la puerta hasta que finalmente logró hacerlo, pero en esta acción una niña resultó con una cortadura en su cara.
“Es por una persona, desconocemos su nombre, que empezó a filtrar una serie de rumores y de cuestiones entonces los papás querían ver cómo estaban los niños que si había clima que si no había clima. Algunos papás venían molestos por la forma en la que actuaron los demás papás y era lo que me venían a reclamar que quien les iba a responder por la agresión sufrida de sus hijos”
Fue en ese momento que llegaron elementos de la Policía Estatal y también de la Policia Investigadora, estos últimos ingresaron a la guardería para calmar los ánimos de los papás, dijo que al enterarse por redes sociales lo sucedido comenzaron a llegar por sus hijos ante el temor de que algo peor ocurriera.
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Ramos Ferreira agregó que hay una maestra golpeada y otra más que resultó con crisis de nervios, advirtió que se presentará la denuncia penal por lo sucedido ya que además de entrar por la fuerza se expuso la integridad de los más de 50 menores.
Un inspector de la Coepris se presentó en la guardería para tomar conocimiento de lo sucedido, posteriormente se procedió a colocar el sello de suspensión de labores. El representante legal afirmó que hay evidencias sobre el comportamiento de algunos padres de familia así como las condiciones en las que se encuentran los niños, por lo que dijo no hay nada que esconder.
“Nosotros no tenemos como institución miedo de esta cuestión, es parte del protocolo y es la forma en la que tiene que actuar Coepris y cualquier otra persona al cuidado de un menor”concluyó el entrevistado.