La vida de un tatuador puede llegar a ser complicada, sin embargo, esta tiene grandes satisfacciones al plasmar emociones y momentos en la piel de las personas, siendo un caso de estos el de Elías Rodríguez Mitzi, mejor conocido como “Blood”, quien es un joven poblano que se dedica a este oficio.
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En entrevista con Multimedios Puebla, “Blood” narró que sus inicios en el mundo del tattoo se dieron cuando tenía 17 años, toda vez que a esa edad se realizó su primer tatuaje, hecho que despertó su interés por estas actividades.
Indicó que su aprendizaje fue de forma autodidacta, consiguiendo él mismo sus propias máquinas para abrirse camino y gracias a su perseverancia, actualmente cuenta con seis años de experiencia.
“Todo esto surgió cuando tenía 17 años y me hice mi primer tatuaje, de ahí surgió el gusto, empecé a investigar más en redes sociales, a empaparme más de esto y después conseguir mis máquinas, fue un proceso complicado, pero sí se puede”, expresó.
Aseguró que a través de su oficio busca poder contribuir a que las personas puedan recordar emociones o momentos que para ellos son significativos, ya que a través de un tatuaje pueden mantener esa sensación para siempre.
“Para mí un tatuaje significa plasmar un momento o recordar un momento de tu vida, a veces no tienen un significado, pero sí hacen que recordemos algún momento de nuestras vidas”, dijo.
Aseguró que, para poder tener éxito dentro de dicha profesión, es necesario tener preparación, ya que al ser un trabajo que es hecho a mano, se necesita saber dibujar, toda vez que implica una gran responsabilidad el dejar plasmado algo en la piel de una persona.
De igual manera, indicó que se debe de tener en cuenta la opinión del cliente y del propio tatuador con la finalidad de poder generar una imagen original y que se distinga del resto.
“Blood” celebró que en la actualidad se dé una mayor apertura en la sociedad para los tatuajes, toda vez que anteriormente estos eran mal vistos y considerados como un tabú.
Sin embargo, también advirtió de situaciones como la aparición de tatuadores no profesionales que al ofrecer sus servicios a bajo precio comienzan a tener preferencia entre la gente, en lugar de buscar la calidad.
“Ahorita mucha gente ya tiene tatuajes, ya está dejando de ser un tabú porque se está rompiendo, incluso ya se considera un delito el que no te contraten en un trabajo por tener tatuajes, estamos en un proceso de aceptación”, manifestó.
Añadió, que una de las metas que tiene es poder participar este año en una expo de tatuadores en Bogota, Colombia, toda vez que ha participado en distintos eventos de este tipo en Puebla.
Tras la experiencia adquirida a lo largo de seis años, Elías Rodríguez animó a las personas que desean dedicarse a ello, a qué perseveren y hagan trabajos de calidad.
Este 17 de julio se celebra el día internacional del tatuador, siendo un oficio que en los últimos años ha ido ganando terreno dentro del mercado laboral.
CHM