Extraer agua del Pánuco para llevarla a Nuevo León y Tamaulipas afectará a siete estados y 136 municipios por los que pasa la cuenca de este río, pues se romperá el ciclo hidrológico y lloverá menos, afirmó el especialista Alfonso Arroyo Amezcua.
“El agua no brota completamente aquí, viene desde toda la cuenca y (el proyecto del acueducto) afectaría lógicamente a todos los estados aguas arriba”, apuntó el vocal del Consejo de Cuenca del Río Pánuco.
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Se trata de Veracruz, Tamaulipas, San Luis Potosí, Guanajuato, Querétaro, Hidalgo y Estado de México, con 23, 13, 36, 5, 14, 40 y 5 municipios, respectivamente, que recibirán en mayor o menor medida impactos, aseguró.
“Esta cuenca no es nada más de Las Adjuntas hasta la desembocadura, son siete estados que se verían afectados, porque en el ciclo hidrológico la evaporación de agua de mar pasa y se encuentra con agua caliente, llega a las partes altas, se condensa y llueve, pero en el momento que saquemos agua del Pánuco se rompe el equilibrio y esa agua ya no regresa”.
Arroyo Amezcua expresó que anteriormente se desistió de dos proyectos para enviar agua del Pánuco a Monterrey, pues las condiciones ecológicas, económicas, técnicas, políticas y sociales no permitieron cristalizarse.
“Los costos de llevar agua son muy altos, endeudando a los estados y comprometiendo por muchos años a los usuarios con un costo elevado por la operación, conservación y administración de las obras hidráulicas para enviar un agua de mala calidad, pues se trata del segundo río más contaminado del país”.
Sostuvo que el acueducto deteriorar los ecosistemas actuales de los humedales, afectando el uso doméstico y urbano de los poblados y ciudades, pero además, “se dejaría de producir alimentos en la zona de las huastecas y también se afectaría el desarrollo industrial de la región”.
“Es el segundo río más contaminado, bajan muchos virus y bacterias de los estados por donde pasa, pero aquí tenemos depredadores que los controlan, imagínense llevar el agua a un sistema donde no exista un depredador”, advirtió. Recordó que desde el año 2012 se quiso hacer la extracción, primero con el proyecto Pánuco al Norte y después con Monterrey VI. “Uno pretendía llevar 12 mil litros por segundo durante todo el año y el otro 15 mil”.
El experto mencionó que también Coahuila levantó la mano en su momento, sin embargo, un grupo de defensa que se integró en el norte de Veracruz demostró que los planes no eran viables.
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Alfonso Arroyo destacó que el norte de Veracruz, sur de Tamaulipas y oriente de San Luis Potosí se encuentran en una situación muy vulnerable ante los daños de la sequía, “aunado a la amenaza de perder la poca agua que queda”. Apuntó que ante la escasa disponibilidad que se refleja principalmente en época de estiaje, “el agua por derecho prioritario pertenece a los habitantes de la huasteca”.
VLSS