Trabajadores de la empresa Bonafont protestaron frente a las instalaciones de Casa Aguayo, sede del gobierno estatal, así como en las inmediaciones de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) para exigir la liberación de la planta embotelladora de agua en Juan C. Bonilla que se mantiene tomada por un grupo de pobladores desde el pasado 22 de marzo.
El grupo de, al menos, 150 trabajadores demandó la intervención del gobierno que encabeza Miguel Barbosa Huerta y de la Federación para que sea liberado el inmueble ubicado sobre la carretera federal México-Puebla a la altura del kilómetro 96.1, en la localidad de San Mateo Cuanalá y puedan recuperar su fuente de empleo.
La planta fue tomada hace más de cuatro meses por integrantes del movimiento Pueblos Unidos, quienes acusan a la firma embotelladora, que pertenece al Grupo Danone, de traficar con el agua y sobreexplotar los mantos acuíferos de la zona.
Los trabajadores ataviados con uniforme de la empresa y con cubrebocas desplegaron manta con la leyenda “¡Señor Gobernador! Te exigimos una solución a la reapertura de Bonafont”.
Tras una audiencia con el gobierno estatal, trabajadores de la empresa optaron por movilizarse a las instalaciones de la representación de la Conagua en busca de resolver el conflicto.
La interrupción de la planta, según un comunicado que publicó la empresa en el mes de abril, ha limitado la distribución de agua purificada a consumidores en distintas regiones de Puebla.
Por su parte, el colectivo Pueblos Unidos Nahuas de la Región Cholulteca y de los Volcanes convocó a un diálogo público con representantes de los diferentes órdenes de gobierno y directivos de la empresa para “resolver el conflicto relacionado con la empresa Bonafont trasnacional francesa del Grupo Danone.
Gobierno federal debe solucionar conflicto: Barbosa
La Federación debe salir a dar la cara y no evadir su responsabilidad para solucionar el conflicto que pobladores de San Mateo Cuanalá mantienen con la embotelladora de agua Bonafont por el cierre de su planta en Puebla, sentenció el gobernador Miguel Barbosa Huerta.
El mandatario mencionó que su gobierno será intermediario con los 150 empleados de Bonafont que se manifestaron afuera de Casa Aguayo en protesta por el bloqueo que pobladores de Cuanalá y activistas del colectivo Pueblos Unidos mantienen a su fuente de empleo.
Sin embargo, demandó a la delegación en Puebla de la Segob y a la Conagua que solucionen esta problemática ante las licencias que fueron expedidas.
mpl