Debido a la ingesta excesiva de bebidas azucaradas y alcohólicas, así como de comida procesada y altamente calórica decembrina, los servicios de urgencias del sector salud se elevan 35 por ciento durante la época decembrina.
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El Instituto Mexicano del Seguro Social informó que la combinación de bacalao, romeritos, pescado seco, ponche, bebidas alcohólicas, endulzantes y ensaladas, derivan en un descontrol metabólico, por lo que los servicios de urgencias se saturan los 25 de diciembre y el 1 de enero.
Las fiestas decembrinas, en esta ocasión, son aun más peligrosas; de acuerdo con Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2018, aproximadamente ocho de cada 10 mexicanos sufren de sobrepeso y de obesidad, además de que se elevó en el país el número de diabéticos con 8.6 millones y de hipertensos con 15.2 millones diagnosticados.
En 2018 la mitad de las muertes fueron por afecciones al corazón con 155 mil 450 personas; diabetes, 116 mil 929; tumores malignos, 89 mil 113; enfermedades del hígado, 41 mil 989 y cerebrovasculares 36 mil 695, por encima de los homicidios con acta de defunción que oscilaron entre 35 mil 566 casos.
Por peso y estatura, un mexicano debe consumir en promedio mil 500 kilocalorías diarias, excederse, consumir el doble en una sentada, significaría tapar arterias y saturar los intestinos de grasa.
El gobierno mexicano aplicará acciones urgentes para que la gente conozca la diferencia entre la comida chatarra y los alimentos tradicionales, algunos clasificados como garnachas.
“Una hamburguesa tiene 560 kilocalorías, sin incluir que se acompaña de papas y refresco, frente a pambazo que tiene 438 kilocalorías”, dijo Alejandra Solís, nutrióloga especializada en trastornos metabólicos.
El frijol y la tortilla juntos, precisó, componen una proteína de alto valor biológico, que ayuda a generar masa muscular; se trata de 114 calorías, considerando media taza de frijol y una tortilla que aporta 64 calorías.
“Si a ambos le agregas verdolagas, una taza tiene 20 calorías, y se agrega una pieza de carne, pollo, por ejemplo, que nos da 158 calorías. Este platillo es perfecto y equilibrado”, explicó.
En la fiestas decembrinas es posible comer, sin excederse, un taco de cochinita pibil, que tiene 145 kilocalorías; un plato chico de pozole, o una tostada de pata, inclusive una porción de romeritos.
“Hay que considera que, en promedio, por estatura, un mexicano común debe consumir mil 500 calorías, con una distribución adecuada de vegetales, leguminosas, cereales y carnes. Un taco de cochinita pibil está bien, con cinco tacos llegas a las 725 kilocalorías, es la mitad de las calorías que debemos de comer en un día”.
También hay diferencias entre una torta de jamón o un sándwich casero que pueden tener 346 kilocalorías, con una torta de pierna que tiene 396 y una de milanesa que tiene 685 kilocalorías sin considerar el refresco, el postre y los agregados.
Algo importante a considerar es el uso de aceites hipercalóricos; una cucharadita es igual a 150 kilocalorías, casi un taco de cochinita.
“No debemos usar mucha grasa para los alimentos, todo debe de ser al comal, asado sin ser frito. Siempre debemos comer una porción de cereal que en este caso es la masa de la gordita, una porción de leguminosa que es el frijol, le puedes poner carne ya sea chicharrón o el pollo y una porción de nopales, que dan 337 kilocalorías. Claro que la porción es una no cinco” dijo tras referir que el agua natural es insustituible y que los refrescos dietéticos terminan por alojarse en el sistema nervioso.
kvd