Vecinos de la zona conocida como La Fontana, del fraccionamiento Paseos de la Pradera, bloquearon la carretera federal Jorobas-Tula, para exigir a la alcaldía de Atotonilco de Tula la dotación de agua potable.
Los vecinos de este nuevo sector del desarrollo habitacional, expresaron que a pesar de que pagan sus tarifas a la Comisión de agua potable municipal, enfrentan constante desabasto, lo que les causa afectaciones en sus actividades cotidianas.
Acusaron que el suministro de agua es irregular y a pesar de que en diversas ocasiones acudieron ante representantes del organismo operador no reciben una respuesta a la problemática en una de las zonas con mayor número de habitantes en el municipio.
Por este desinterés de las autoridades en la materia para solucionar la problemática determinaron bloquear el carril en dirección a Jorobas de la vialidad, colocando piedras en el punto para impedir la circulación de unidades.
Dijeron que además de que el desabasto se prolonga por semanas, la calidad del agua que se les suministra es mala, lo que puede repercutir en la salud de los pobladores y por ello retiraron su llamado a las autoridades para intervenir y solucionar de manera integral el caso.
La protesta duró varias horas y a pesar de las peticiones de los automovilistas se negaron a permitir el paso; reiteraron que el suministro de agua debe regularizarse de manera inmediata para no afectar a los pobladores de esta sección del fraccionamiento.
Finalmente los habitantes se retiraron, aunque amagaron con seguir las movilizaciones en caso de que no obtengan una respuesta positiva de parte del área correspondiente en la administración municipal.
Cabe señalar que desde febrero se reportó desabasto también en las inmediaciones de la zona del fraccionamiento conocida como Toscana Alta, lo que motivó otro bloqueo sobre la carretera Jorobas-Tula, en este caso en el carril en dirección a Tula, a la altura del acceso a la unidad habitacional.
Los manifestantes exigieron la renuncia del alcalde Jaime Ramírez Tovar y también de Ramiro Rodríguez Cortés, titular del organismo operador de agua potable por no solucionar el desabasto de agua y mostrar desinterés además a las propuestas y peticiones de los pobladores.
Acusaron además que el organismo les designó la tarifa residencial, la más cara tanto en agua como predial, por lo que propusieron un cambio en el régimen para evitar la merma económica a los habitantes de este fraccionamiento que presenta múltiples problemáticas por la falta de servicios públicos.
En esa ocasión la protesta duró varias horas y fue retirada después de que representantes del gobierno local se comprometieron a reunirse con los afectados para buscar una solución a la problemática.