Mientras tres bebés han sido abandonados en menos de un mes en Nuevo León, los cuneros de Vifac están vacíos.
Desde hace 26 años la asociación civil "Vida y Familia Monterrey" se dedica a ayudar a embarazadas a brindarles un techo, apoyo médico, tratamiento psicológico, asesoramiento escolar e incluso capacitación para el trabajo.
A quienes toman la decisión de no quedarse con el bebé, les brindan acompañamiento legal para darlo en adopción, explicó la directora Caty Pérez Bulnes.
"El único requisito es que no lo abandonen, aquí tienen que venir la mamá y el bebé y si no puede quedarse con él hacemos todos los trámites para poder buscarle legalmente una familia que lo arrope. No las vamos a juzgar, no las vamos a investigar y vamos a cuidar su identidad, pueden tener la certeza de eso".
En este lugar atienden en promedio a 30 embarazadas al mes, en su mayoría adolescentes o mujeres de más de 40 años.
Los principales motivos que han detectado para que una mujer decida no quedarse con el bebé es que vive en un entorno de violencia, tienen problemas económicos o sufrieron algún trastorno afectivo.
Vifac puso a disposición de mujeres o familias que requieren la atención el teléfono 811 279 61 86.
El lugar se ubica en Zaragoza 625 sur en la colonia La Pastora en Guadalupe y pueden llegar en las rutas 214, 223, 71 y 420 así como en el metro estación Exposición y Eloy Cavazos.
Responsables de abandono podrían obtener hasta 4 años de prisión
La Fiscalía General de Justicia del Estado de Nuevo León (FGJNL) informó que las personas que abandonen a menores de edad, adultos mayores o incapaces de cuidarse a sí mismos, podrían recibir de un mes hasta cuatro años de cárcel.
Esto, ante el aumento de casos de bebés recién nacidos que son hallados en la vía pública.
De acuerdo con el Código Penal Federal, en su Artículo 335 título décimonoveno, "a la persona que abandone a un niño incapaz de cuidarse a sí mismo o a una persona enferma, teniendo obligación de cuidarlos, se le aplicarán de un mes a cuatro años de prisión, si no resultare daño alguno, privándolo, además, de la patria potestad o de la tutela, si el delincuente fuere ascendiente o tutor del ofendido".