Víctor Sánchez Espinosa, arzobispo de Puebla, encabezó una misa en la Catedral Archibasílica el Santísimo Salvador del Mundo, y de los Santos Juan Bautista y Juan Evangelista en Letrán, conocida como Basílica de San Juan de Letrán, donde se encuentra la sede episcopal del Papa; mientras que el religioso poblano, Miguel Ángel Castro Muñoz, obispo de Huajuapan de Leon, Oaxaca, se encargó de la homilía.
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Sánchez Espinosa, junto con su obispo auxiliar, Tomás López Durán, y Castro Muñoz forman parte del grupo de 36 obispos del centro de México adscritos a las provincias de Puebla, Guadalajara, Hidalgo, México y Morelia, que realizan la llamada Visita Ad Limina en Roma, la cual, incluye una reunión con Mario Bergoglio.
La arquidiócesis de Puebla informó que, como parte de las actividades de la Visita Ad Limina, Víctor Sánchez Espinosa, presidió la celebración religiosa en la Basílica de San Juan de Letrán; mientas que homilía fue pronunciada por el religioso poblano, Miguel Ángel Castro Muñoz, obispo de Huajuapan de Leon, Oaxaca.
Durante la misa, los obispos mexicanos oraron porque la visita a Roma se traduzca en beneficios para los fieles católicos y, al mismo tiempo, cuenten con la fortaleza para cumplir con las recomendaciones que les haga el Papá Francisco en la reunión programada para este viernes 2 de junio en el Vaticano.
En la denominada Visita Ad Limina apostolorum que realizan los obispos mexicanos, entre ellos, los poblanos, acuden a las tumbas de los apóstoles San Pedro y San Pablo en Roma, y realizarán las presentaciones de los informes al Papa Francisco sobre el estado que guardan las diócesis, así como los diferentes retos actuales en materia religiosa.
La Visita Ad Limina inició el lunes 29 de mayo en la Basílica de San Pedro, en Roma, en donde el grupo de obispos de las diócesis del centro del país participaron en una celebración eucarística encabezada por Carlos Aguiar Retes, cardenal de la arquidiócesis de México.
Los religiosos mexicanos, entre ellos, los obispos poblanos, ya se reunieron en el Dicasterio para el Clero, donde Gonzalo Alonso Calzada Guerrero, obispo de la Diócesis de Tehuacán fue el relator.
A la par, los religiosos de México estuvieron en la Secretaría General del Sínodo de los Obispos, donde el relator fue el poblano Miguel Ángel Castro Muñoz, obispo de Huajuapan de León.
Tras su peregrinación por las tumbas de San Pedro y San Pablo, los obispos mexicanos visitarán algunos dicasterios como el Pontificio Consejo para las Comunicaciones Sociales, el Pontificio Consejo para los Laicos, la Congregación para el Clero, la Congregación para los Institutos de Vida consagrada y Sociedades de Vida Apostólica, la Congregación para la Doctrina de la Fe, el Pontificio Consejo para la Educación Católica, el Pontificio Consejo para los Operadores de Salud, el Pontificio Consejo para la Cultura y la Secretaría de Estado, entre otros organismos vaticanos.
En la religión católica, la Visita Ad Limina la realizan todos los obispos, en general, cada cinco años, a Roma; sin embargo, el inicio de la pandemia de Covid-19 modificó los programas. Las visitas a las tumbas de los apóstoles Pedro y Pablo es una expresión de comunión eclesial y el encuentro con el Papa como sucesor de San Pedro. En el encuentro con el Papa, los obispos informan sobre la situación de la Iglesia en cada una de sus diócesis. De manera previa, cada obispo envío un informe sobre el estado de la diócesis desde la última visita Ad Limina.
En junio de 2014, hace nueve años, el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, y sus entonces tres obispos auxiliares, Tomás López Durán, quien sigue en el puesto; Felipe Pozos Lorenzini, quien ahora es obispo de la Diócesis de Ciudad Obregón; Eugenio Lira Rugarcía, quien es obispo de Matamoros, participaron en la Visita Ad Limina.
CHM