En Madero y Altamira se tienen detectados 3 mil 300 abuelitos que viven completamente solos, por lo que sus condiciones son precarias.
En la ciudad industrial existe un registro de 8 mil 500 adultos mayores con alguna carencia alimentaria o económica, pero los que viven en total soledad son 2 mil 500, es decir, el 30 por ciento.
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En Madero se calcula que hay 800 personas de la tercera edad que viven sin la compañía de alguien más.
En esta situación surgen hasta 50 nuevos casos por año, de acuerdo con las estadísticas que el DIF emitió en 2018.
Sin opciones
En Altamira, se indica que muchos de los 2 mil 500 adultos mayores que viven solos, es porque así lo acordaron con sus familiares o éstos ya no viven en la ciudad. Alfredo Polanco, responsable de la Secretaría de Bienestar Social, refirió que “se realizó un censo y se detectó a 8 mil 500 abuelitos que fueron beneficiados con un programa de apoyo alimentario a base de despensas”.
Detalló que “el 30 por ciento” del total de estos adultos mayores, es decir 2 mil 500, son los que viven completamente solos y se les da seguimiento a través de la dependencia.
En el sector Monte Alto se pudo hablar con la señora Rosa Medellín de 81 años, quien vive sola en su domicilio y argumenta que aún no puede acceder a programas sociales para poder comer.
Ataque a viejecitoUno de los casos que más se recuerdan en Altamira en el último mes, es el de un adulto mayor de sesenta años que fue abandonado en la vía pública con heridas con arma punzo cortante, según el reporte de la autoridad. El abuelito fue abandonado sobre el bulevar Allende, cercano al distribuidor vial y tenía múltiples heridas; según testigos, esta persona siempre andaba solo y ya había sido lastimado en varias ocasiones.
Van cinco en el añoEn Madero hay 800 abuelitos en el abandono, al año se pueden irsumando hasta 50, viven solos y tienen enfermedades crónico degenerativas.
En este año se han atendido ya cinco casos nuevos, sin embargo en ninguno se ha acreditado violencia física pero las averiguaciones siguen su curso.
De acuerdo con estadísticas del DIF Madero, hasta septiembre del 2018 se tenía un registro de 800 personas de la tercera edad que recibían omisión de cuidados por parte de sus hijos o parientes cercanos.
Todos vivían solos, se les daba apoyo médico y alimentario, es decir se les proporcionaban despensas o se les atendía en los comedores comunitarios.
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Por ahora el DIF está atendiendo cinco nuevos casos; su titular Aidé Reyes, explicó que en ninguno se ha podido acreditar violencia física.
Se ha firmado convenio con los familiares para que les den atención, y pese a ello la investigación sigue su cauce, pues la autoridad sí puede obligar a los hijos a hacerse cargo de sus padres, e inclusive se puede interponer una denuncia penal, por omisión de cuidados, que es un delito.
Nury Romero, regidora de Madero, indicó que se pueden recibir hasta tres casos en un mes, y son canalizados al DIF para que reciban apoyo y si es necesario trasladarlos a algún lugar especializado.
Explicó que en el municipio no se han atendido casos de violencia física, pero las personas de la tercera edad no solo reciben una falta de cuidado de sus familiares, en muchos de los casos también de algunas autoridades, por ejemplo los encargados de brindarles los servicios de salud, y ahí también tiene que intervenir el municipio.
Cinco denuncias en Tampico
La Procuraduría del DIF Tampico tiene registradas cinco denuncias por abandono de abuelitos de octubre del 2018 a la fecha, dijo su titular Luis Llorente Herrera.
Estos casos son monitoreados constantemente para que los familiares no incurran de nuevo en el abandono; fueron denunciados de manera anónima.
“Tenemos como cinco casos que nos han canalizado en cuanto a maltrato, no les dan los apoyos o los cuidados en alimentación, limpieza, o si las personas adultas se salen a la calle, no toman las providencias por si se extravían”.
Sostuvo que han actuado gracias a denuncias anónimas, no propiamente de otros familiares.
“El viernes nos reportaron un caso en la colonia Garza Leal, citamos a los familiares por maltrato a un señor que padece Alzheimer; hay que tener criterio, si tengo un familiar enfermo pues debo de ser consciente, no gritar o regañarle, sino apoyar”.
Dijo que en estos casos el DIF manda citar a las familias, se da prioridad a la conciliación, para hacerles ver la obligación que tienen con sus adultos mayores, y de no hacer caso, se da vista al Ministerio Público, que puede fincar el delito de abandono de personas.
ELGH