La ciudad de Tampico como destino turístico tiene más alcance a nivel nacional, pero ahora no es solamente por sus atractivos o por sus cocodrilos, también lo es por su fauna, por la gran variedad de plantas que cautivan a los visitantes y brindan salud al ser medicinales.
Hace tres semanas se inauguró el Vivero Didáctico Municipal, el primero en Tamaulipas y está entre los tres primeros del país, el cual alberga 256 especies de plantas y tiene el objetivo de, en un futuro cercano, proporcionar la materia prima para darle vida a la ciudad.
“Reproducimos por todos lados para que a futuro estas mismas plantas se siembren en las áreas verdes de la ciudad, le den vida a los espacios públicos y puedan generar un ambiente más fresco ante tanto calor”, declaró José Schekaibán, secretario de Servicios Públicos.
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“Desde plantas medicinales hasta bonsái”
Las plantas que los ciudadanos y el turista pueden encontrar es una amplia variedad, porque la población puede encontrar eucalipto, que las abuelas acostumbraban a utilizar para el tratamiento natural de enfermedades respiratorias.
Sin embargo, en dicho espacio se concentra una biodiversidad que toda la población puede conocer, hasta plantas consideradas como decorativas como el bonsái, un pequeño árbol japonés, hasta una planta llamada “pluma de indio”, que hace referencia a las plumas utilizadas por los nativos americanos.
Los niños de las escuelas hacen recorridos en el Vivero Didáctico, a quienes se les inculca el cuidado del medioambiente mediante la siembra de plantas, de alimento y de actividades que los ayudan a observar la forma en que se da el proceso de crecimiento.
“Aquí estamos involucrando a los niños, ellos vienen con una macetita de pet que se les pide y hasta decorada de su personaje favorito se les recomienda.
Aquí en el vivero se les pone tierra preparada, se les da una semilla y la tarea es que la cuiden, que la procuren, para que pueda crecer”, recalcó Pepe Schekaibán.
Envidian la flora de Tampico
Los árboles, flores y plantas de Tampico comenzaron a tomar más vida tras la primavera, así que los visitantes observaron algunas especies en su máximo esplendor, como por ejemplo “el palo de rosa”, que con su color pastel le da una imagen envidiable a varios paseos.
El ambientalista Rubén Dueñas Valencia, especialista en fauna de la zona, indicó que “En cantidad de árboles tenemos una amplia variedad, desde el árbol de mango, jovito, flor de mayo, framboyanes, poca jacaranda, palo de rosa, chijoles, orejones. Una lista envidiable en verdad”.
Durante las vacaciones de Semana Santa imágenes en redes sociales de los vacacionistas se hicieron populares, en las cuales destacó el color rosado.
“El palo de rosa es uno de los favoritos, florece en primavera y, según las vacaciones anteriores, la gente que viene en Semana Santa y ve las flores se las quieren llevar”.
Hay que generar más áreas verdes en construcciones
La temperatura en la zona es cada vez más intensa, el termómetro llega a alcanzar hasta los 40 grados centígrados y eso que aún es verano.
Eso se debe a la falta de áreas verdes entre los desarrollos, aseguró el ambientalista. Dueñas Valencia explicó que en las construcciones nuevas se tiene que dejar 15% para la jardinería; sin embargo, “Cuando compra el propietario pavimenta y ya hay mínima absorción del suelo, lo que genera el calentamiento, se siente más calor como resultado en estos tiempos”.
Detalló que se tiene que legislar para que haya cada vez más espacios para áreas verdes en las ciudades, en las viviendas y pueda mitigar el intenso calor que llega a ser sofocante.
“Deben existir menos banquetas y más áreas verdes, más árboles, eso ayudará a mantener la zona verde para las nuevas generaciones”, recalcó el activista.
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