La Zona Metropolitana de Puebla cuenta con las bases para convertirse en una ciudad del conocimiento que se traduzca en una mejor calidad de vida para sus más de dos millones 300 mil habitantes a partir de la incorporación de la tecnología.
Enrique de la Madrid Cordero, director del Centro para el Futuro de las Ciudades del Tecnológico de Monterrey, señaló que ciudades como Puebla cuentan con la posibilidad de brindar una mejor calidad de vida a partir de atender y solucionar los problemas de movilidad, calidad del aire y vivienda.
El primer paso para que Puebla se convierta en una ciudad del conocimiento que atienda las necesidades de sus habitantes consiste en la definición de una vocación, la cual, estará ligada con la aplicación de la tecnología porque las economías están cambiando de la manufactura a la digitalización.
“Desde las ciudades, es importante definir desde qué va a vivir. Estamos en una transición de economía, estamos pasando de economías manufactureras a economías digitales. Muchas de las ciudades que están basadas en la industria y ahora tendrán que moverse para ser ciudades del conocimiento”, apuntó.
En entrevista para MILENIO Puebla, el investigador del Tecnológico de Monterrey explicó que la pandemia del covid-19 cambió al mundo y las ciudades requieren adaptarse a los nuevos tiempos para mejorar la calidad de vida.
“Estábamos en una transformación cuando apareció la pandemia y nos cambió el mundo. Estábamos en la transformación digital cuando el mundo del covid-19 lo acelera. Ahora, se vuelve más relevante saber lo que está sucediendo en el mundo para que nuestras ciudades se incorporen a esa tendencia y todo ¿para qué? Para que mejore la calidad de vida de los habitantes”, destacó.
Resaltó que la Zona Metropolitana de Puebla, la cuarta más grande del país, cuenta con fortalezas y vocaciones, como la industria, particularmente, en el sector automotriz y la proveeduría, lo cual, no cambiará en el corto ni mediano plazo.
“Tradicionalmente, Puebla tiene una vocación industrial, particularmente, en el sector automotriz y desarrolló una vocación de proveeduría alrededor del sector automotriz. Eso no va a cambiar, no se dejarán de fabricar automóviles; sin embargo, habrá otro tipo. No está lejano el día en el que dejará de haber coches que se muevan con combustible. Algunas compañías planean para el 2031 dejar de producir automóviles que se desplacen con combustibles, entonces, habrá coches eléctricos”, apuntó.
Otra de las vocaciones fundamentales de la Zona Metropolitana de Puebla es la relacionada con el sector educativo, ya que recibe a estudiantes no solo del estado de Puebla y Tlaxcala, sino de diferentes entidades de la República.
“Puebla es una ciudad muy atractiva desde el punto de vista estudiantil. Hay muchas universidades de calidad y mucha gente de diferentes partes de México y de diferentes países del mundo llegan a estudiar. ¿Cómo le hacemos para que siga siendo atractiva porque la educación va a cambiar, va a evolucionar y se volverá más digital?”, destacó.
Comentó que en la Zona Metropolitana de Puebla se requiere de la generación de políticas públicas que impulsen un área sostenible, que ofrezca un mejor futuro para sus habitantes y en las que los ciudadanos estén al centro de la toma de decisiones en materia de vivienda, movilidad, gobernanza, planeación urbana, seguridad y sostenibilidad.
Por último, el especialista del Tecnológico de Monterrey destacó que una zona metropolitana parte de los ciudadanos y, por ende, es obligación de todos los sectores de la sociedad involucrarse en su transformación a partir del diálogo y la colaboración para promover mejores prácticas urbanas.
mpl