La Universidad Iberoamericana Puebla, a través del Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría (IDHIE) y la Clínica Jurídica Minerva Calderón, solicitó ante el Juez de Control del Juzgado de Oralidad Penal y Ejecución de la Región Judicial Centro del Estado de Puebla que se garantice que la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGE) de Puebla investigue la muerte de Zyanya Estefanía Figueroa Becerril con perspectiva de género y debida diligencia.
Hace cuatro años, el 16 de mayo de 2018, Zyanya Estefanía Figueroa Becerril, joven pediatra de 26 años, fue encontrada muerta en su departamento de la ciudad de Puebla, junto con una carta de despedida. Zyanya Estefanía era trabajadora del Hospital del Niño Poblano y, de acuerdo con sus compañeros de trabajo, era víctima de acoso laboral. Los familiares de Zyanya Estefanía solicitan que se investigue el caso como un feminicidio debido a las inconsistencias en la evidencia.
La Ibero Puebla, a través del documento denominado Amicus Curiae o Amigos de la Corte, figura de participación utilizada tradicionalmente ante Tribunales para dar oportunidad a personas que no son parte en los procesos, aportar valoraciones, llamó a esclarecer la muerte de la joven.
“El documento pretende hacer llegar al Juez de Control información sobre el contexto generalizado de violencia feminicida en Puebla; las omisiones relacionadas con la apertura de la investigación, las acciones de las autoridades en el lugar de los hechos, el seguimiento de la investigación, los dictámenes periciales y los derechos de las y los familiares por ser víctimas indirectas; así como, las obligaciones internacionales en materia de derechos de las mujeres contraídas por el Estado mexicano”, informó la Ibero Puebla.
La institución que forma parte del Sistema Universitario Jesuita resaltó que el Amicus se presenta para fortalecer los argumentos fáctico-jurídicos sobre los cuales el Juez de Control podría cumplir con su obligación de juzgar con perspectiva de género, particularmente, recuperando los criterios establecidos en su Protocolo por la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
“En específico, se brinda información documentada por el Observatorio de Violencia Social y de Género (OVSG) de la Ibero Puebla sobre la disparidad de las cifras de feminicidios recabadas a partir de notas periodísticas y las publicadas oficialmente durante el 2020, lo cual podría indicar que la autoridad encargada de la procuración de justicia ha descartado la línea de investigación por feminicidio en, al menos, ocho muertes violentas de mujeres”, añadió la Ibero Puebla.
De la misma firma, la institución poblana de educación superior destacó que los estándares internacionales y nacionales en la materia establecen que las muertes violentas de mujeres deben de analizarse con perspectiva de género.
“Toda muerte violenta de una mujer debe ser investigada como feminicidio con el fin de analizar la existencia de condiciones de violencia estructural y discriminación por razones de género previas al asesinato de las mujeres, tal y como estableció la SCJN en la Sentencia de Amparo sobre el Caso de Mariana Lima Buendía”.
En el documento, la Ibero Puebla resalta la obligación de la Fiscalía General del Estado de investigar con debida diligencia, compuesta por una serie subprincipios que se han vulnerado sistemáticamente durante la investigación de la muerte Zyanya Figueroa: oficiosidad, oportunidad, competencia, independencia e imparcialidad, exhaustividad y participación de sus familiares como víctimas indirectas.
CHM