Luego de que el Sistema Penitenciario de la Ciudad de México asegurara que por lo menos 179 menores de edad fueron capturados por cometer delitos como robo e incluso asesinato, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, dijo que en este caso el Sistema Penal Acusatorio estableció una práctica completamente distinta a la que había antes.
“Menores recluidos pasaron cerca de 600 por lo menos, son más pero conozco el caso de San Fernando, de la comunidad de menores o del Centro de Reclusión que hay ahí, pasaron de casi 600 a 40 porque los demás llevan sus penas en libertad o tienen otro tipo de formas de cubrir las penas establecidas por los delitos, y eso está establecido en él”, dijo.
¿Qué estamos haciendo nosotros?, comentó, más que seguir aumentando penas, es un trabajo distinto de prevención, de atención a las causas.
“Los PILARES, las nuevas preparatorias, la propia universidad, el trabajo que ya vamos a presentar, que lo hicimos el año pasado, pero que ahora lo tenemos más fortalecido, es un programa que llamamos Jóvenes Unen al Barrio, que va a permitir que los jóvenes que están cerca de la delincuencia puedan tener otras actividades”.
Acotó que un trabajo muy intenso que se está desarrollando en la subsecretaría de Penitenciarios con los jóvenes en reclusión es que sigue participando, “en un esquema de trabajo con los jóvenes recluidos de tal manera que no salgan y sigan delinquiendo sino que tengan un esquema y proyectos de vida distintos”.
Por ello, manifestó, apostamos mucho más a las causas, obviamente, cuando hay jóvenes que cometen un delito más grave, se tiene que cumplir la justicia.
En el caso de quien purga una condena en los distintos reclusorios de la ciudad, recordó que hay una orientación federal para trabajar leyes de amnistía.
“Nosotros trabajaríamos el caso de indígenas, personas enfermas o adultos mayores o con discapacidad. Ya se está laborando en esta propuesta para que personas que llevan mucho tiempo recluidas y están en estas condiciones puedan tener su libertad”, concluyó.
EB