Fue la voz mesurada, el tono casi dulce de la diputada Tatiana Ángeles la que evitó el primer incendio e hizo posible un debate de dos horas y cinco minutos en el Congreso de Hidalgo.
Al reanudarse la sesión con receso de 47 horas, el diputado presidente Humberto Veras Godoy llegó dispuesto a regar la gasolina en la sala de sesiones y le dio el cerillo a su compañero de bancada Rafael Garnica.
Sólo tocó la campana que tiene en la mesa de la presidencia y sin más le dio la palabra para que éste solicitara un nuevo receso.
Mayka Ortega reaccionó con rápido reflejo. Interpeló al presidente y exigió que se apegara a la orden del día. En dos segundos todos los diputados de oposición a Morena gritaron su frase de batalla de esta tarde: “¡Respeto a la Ley… respeto a la ley!” y se sintió de inmediato que las tribunas estaban a su favor, cortesía del diputado Asael Hernández, coordinador del PAN.
En medio del escándalo hicieron subir a la diputada Viridiana Jajaira Aceves -que anteayer era del Panal y ahora del PES- para leer el acuerdo de la Junta de Gobierno motivo de la discordia. Nadie la escucha.
Veras Godoy intentó hacer votar la solicitud de receso, pero la gritería hizo inaudible su disposición. Inició lo que parecía una fuga hormiga orquestada por Morena. La primera que tomó su bolso y buscó la salida fue Corina Martínez de Pachuca, luego José Luis Muñoz de Huasca, José Antonio Hernández de Tulancingo y el propio Garnica de Apan.
Más de la mitad de la bancada de Morena se quedó en sus curules lo que dio pie para cuchichear una fractura.
Entonces, pidió la palabra Tatiana Ángeles de Actopan, la única morenista con experiencia legislativa de todo su grupo: “A nadie conviene la confrontación. Estamos frente a un problema de interpretación de la ley. Requerimos una consulta jurídica de expertos. Si somos inflexibles será cansado y agotador encontrar solución”, dijo a una sala que la escuchó con atención.
Julio Varela Piedras también traía consigo un extinguidor. Reconoció la voluntad de Tatiana Ángeles y si bien dijo, esta legislatura ya es histórica “hagámosla respetando la ley”.
Se desgranó entonces una fiebre de tribuna. Subieron cinco oradoras: Roxana Montealegre, Claudia Lilia Luna, Susana Ángeles, Mayka Ortega y hasta Lucero Ambrocio que ofreció dar clases de hñahñú.
Se pierde el ritmo de debate porque Humberto Veras desde la presidencia deja ver que no conoce el momento en que debe ceder la tribuna “para hechos”, “para alusiones personales” o un posicionamiento; también es evidente que no conoce de nombre a los diputados, incluso a los de su propia bancada.
El debate se centra en la interpretación de los artículos 98 y 99 de la Ley Orgánica y cada bloque la entiende a su favor. También se pican la cresta y desde la tribuna se arrojan algunas piedras verbales.
La más asediada en las argumentaciones es María Luisa Pérez Perusquía; ella fue la presidenta de la Junta de Gobierno de la Legislatura anterior que cambió el 31 de julio el contenido de los dos artículos y es ella también quien está propuesta para presidirla en el primer año de la nueva legislatura.
Asael Hernández que tiene mucho tiempo con la mano alzada por fin es visto por Veras Godoy y le concede la palabra. Lee una argumentación que preparó y hace estallar una gran ovación de la tribuna cuando Veras le dice que su tiempo ha terminado y él le recrimina: “usted nos tiene aquí, en 47 horas de receso y me quiere coartar ¡le pido respeto!”. E intenta darle la puntilla a Morena: “si se sienten agraviados, acudan a los tribunales”.
Pero en Morena tienen claro su objetivo y lo hacen saber. No vamos a ceder la presidencia de la Junta, dice Roxana Montealegre. Se terminó el poder para ustedes, declaran Jorge Mayorga y Susana Ángeles; señala que si la mayoría no tiene la junta va contra las buenas prácticas parlamentarias pero en su análisis cruza una línea: le dice a María Luisa Pérez Perusquía que no pueden tener la junta porque quieren seguir manipulado la Auditoria Superior y pretende ocultar el desvío de recursos.
La ex presidenta del Congreso había pensado muy bien su defensa. En una intervención anterior dijo que las reformas se hicieron a conciencia a partir de 37 iniciativas de 8 diferentes partidos y que habían sido aprobadas incluso con el apoyo de Morena.
Del golpe personal de la joven diputada de Tizayuca respondió con voz alta: “debe presentar la denuncia, presentarla ya, porque de lo contrario usted ha expresado injurias y voy a defender mi nombre”.
El ambiente se tensó aún más cuando, por tercera ocasión sube Mayka Ortega a la tribuna y sin miramientos les dice a la bancada de Morena que han perdido el rumbo, estaba encarrilada contra el bando opuesto cuando de la tribuna responden los espontáneos y el griterío le da a Veras Godoy el argumento que estaba esperando desde un principio: declara un receso por falta de condiciones para continuar. Son las 8:24 de la noche y queda, de nuevo una nube de frustración.
El incendio no se pudo evitar. Fue demasiada gasolina.