Del 3 al 7 de enero, el Senado aplicó 555 pruebas para la detección del covid-19, de las cuales, 57 casos resultaron positivos, es decir, que alrededor de 14 por ciento de los trabajadores que se han presentado a laborar están contagiados tras las fiestas decembrinas.
Fuentes consultadas por MILENIO precisaron que, además, cerca de 45 personas que se han practicado pruebas en algún laboratorio privado resultaron positivas. En esta cuarta ola también se contagiaron los senadores de Morena, César Cravioto, Susana Harp y José Luis Pech; del PT, Geovanna Bañuelos y Gonzálo Yáñez; del PAN, Damián Zepeda y del PRI, Eruviel Avila.
De acuerdo con datos oficiales del Senado, alrededor de 584 trabajadores han asistido a laboral presencialmente en la última semana, es decir, el 18 por ciento de los empleados, esto, porque los legisladores están en periodo de receso y la mayoría realiza home office para evitar contagios.
Luego de que cinco legisladores y algunos trabajadores resultaron contagiados en menos de dos semanas, el Senado mantienen medidas sanitarias tomadas desde los inicios de la pandemia en 2020, como la toma de temperatura y la entrega de gel antibacterial. Sin embargo, éstas resultan insuficientes, pues cualquier persona puede ingresar a las instalaciones, a pesar de contar con síntomas como escurrimiento nasal y tos.
Durante un recorrido realizado por MILENIO en las instalaciones de Reforma e Insurgentes, se observó que no todos los dispensadores de gel antibacterial funcionan, a pesar de estar cerca de elevadores y hasta afuera del Salón de Plenos, aunque en este momento el Senado está en receso y no hay sesiones.
A petición de algunas legisladoras se retiraron los tapetes sanitizantes (trapeadores) colocados en los accesos principales de los edificios, pues afirmaron que eran resbalosos y algunas senadoras estuvieron a punto de caerse.
Las oficinas lucen vacías y sólo algunas están laborando, el personal de limpieza realiza sus labores cotidianas, aunque algunas trabajadoras informaron que sí se ha dado la orden de mantener limpios y desinfectados escritorios, sillas, pisos, etc.
Una de las áreas donde están laborando es la del morenista César Cravioto, quien hace unos días que se libró del coronavirus. Los trabajadores afirmaron que se mantienen las medidas preventivas, pero hasta el momento nadie ha presentado síntomas y quien estuvo cerca del senador salió negativo en su prueba.
Mientras que en la oficina del panista Damián Zepeda, quien el 7 de enero pasado informó que salió positivo a covid, Elisa Hansmann consideró que no es necesario aislarse debido a que no presentó ningún síntoma.
“No, realmente como no tenemos síntomas no tengo porque aislarme en este momento. Las indicaciones del Senado han sido que haya el mínimo de colaboradores. Han estado sanitizando las oficinas, nos piden el uso de cubrebocas, de echo el grupo parlamentario nos proporciona cubrebocas, nos toman temperatura, nos revisan y si hay alguien con síntomas se pide que se haga la prueba”, expresó.
- ¿El senador tuvo contacto con alguno de ustedes?
“No, estamos regresando a penas de la temporada decembrina, al menos (yo), no he tenido contacto con él, hasta el momento, está resguardado”, dijo.
Mientras que en otra de las oficinas, Héctor Hugo Saucedo consideró que ellos se han organizado para evitar la propagación del virus.
“Son las mismas medidas de poner desinfectante, de tomarte la temperatura, y lavarnos frecuentemente las manos, estar menos personal en cada oficina (¿cuántos trabajadores hay en un día normal de sesión a ahora más o menos?) ahorita sólo yo, normalmente somos siete, ocho personas en la oficina, en esta pandemia estamos uno o dos en la oficina, nos vamos rotando, al menos en nuestra oficina (las medidas) están bien, porque no nos hemos contagiado”, afirmó.
La vicecoordinadora del PAN, Kenia López recordó que en el reglamento del Senado se establece que durante la pandemia las sesiones pueden ser híbridas, para evitar contagios de legisladores y trabajadores.
“Yo haría un llamado al Congreso mexicano, al Senado de la República y al mismo gobierno federal: es necesario proteger la salud de los colaboradores del gobierno, y por supuesto, quienes tengan la posibilidad de hacer su trabajo a distancia, es necesario que haya sensatez en la Cámara, porque si las personas pueden hacer su trabajo a distancia lo más oportuno, lo más humano, es que puedan hacer trabajo desde casa”, expresó.
Será hasta el 1 de febrero cuando inicie el periodo ordinario y los legisladores establecerán si regresan a las sesiones presenciales o se realizarán a distancia para evitar alguna propagación del coronavirus.
LP