Con el voto en contra del PT, PRI, Movimiento Ciudadano y la abstención del PAN y PRD, la mayoría de Morena y el PES aprobaron, en lo general, la Ley Federal de Revocación de Mandato, con lo que se busca que los ciudadanos decidan, en 2022, si están a favor o en contra de que el presidente Andrés Manuel López Obrador permanezca en el cargo para el periodo que fue electo.
Morena y Encuentro Social rechazaron la propuesta del bloque opositor para posponer el análisis de la ley, instalar una mesa de trabajo de todos los grupos parlamentarios y tener una reunión con el Instituto Nacional Electoral (INE); avalaron el dictamen en lo general y aprobaron que las reservas se lleven al Pleno.
La oposición se inconformó por el trato de “iniciativa preferente” que se le dio a esta ley, y consideraron que se votó un dictamen no acabado con temas encorchetados.
La petista Nancy de la Sierra fue la primera en alzar la voz al señalar que el proyecto de dictamen no es claro, pues cuenta con muchos temas encorchetados, por lo que no hay un texto terminado. Sin embargo, la presidenta de la Comisión de Gobernación, la morenista Mónica Fernández, explicó que primero se votarán los artículos que cuentan con consenso y posteriormente los que no lo tieen.
El senador del PAN, Damián Zepeda propuso la creación de una mesa técnica de debate representando a todos los grupos parlamentarios; además, dijo que se debe tener una reunión de trabajo con el INE para poder escuchar opiniones, experiencias y, sobre todo, las necesidades presupuestales para poder desarrollar dicho ejercicio el próximo año.
“Me manifiesto en lo general de la herramienta, pero me preocupan algunos temas puntuales, por ejemplo: la pregunta. La herramienta se llama revocación de mandato, no continuación de mandato, por más que han querido insistir una y otra vez del Presidente de la República, se trata de ratificar, y de dar un mensaje de apoyo a su mandato, pues es que no, no es lo que dice Damián, no es lo que dice el PAN.
“La Constitución dice que la revocación de mandato, en un transitorio, es la conclusión anticipada del Presidente de la República y dice por qué: por pérdida de confianza, no es un premio, es un castigo, es una herramienta donde se organizan los ciudadanos para quitar un mal gobernante y esa tiene que ser la pregunta”, subrayó.
A nombre del PRI, la senadora Claudia Ruiz Massieu adelantó que su grupo parlamentario no puede acompañar la ley reglamentaria, pues se trata de “una película que ya hemos visto una y otra vez. Las razones son múltiples, las hay de categoría política, las hay de forma y de fondo”.
En su intervención, destacó que buscan aprobar esta ley “al vapor”, sin construir consensos y sacarla sin concentración ni diálogo, a la vez que recordó que cuando se aprobó la reforma de revocación de mandato –en 2019- los legisladores de la mayoría se comprometieron a que cuando se discutiera la ley secundaria, seguirían el mismo proceso de consenso plural, mediante una mesa de trabajo para poder construir la ley, “ese compromiso no se ha honrado con esta ley”.
Insistió en que “la prisa es mala consejera”, y subrayó que “no hay un consenso para darle solidez y legitimidad política a esta propuesta, pero, tampoco, una solvencia técnica, al no querer escuchar a otras instancias que necesariamente deben participar en este proceso, por esas razones, y otras que plantearemos con un voto particular, no podremos acompañar con un voto afirmativo para un extraordinario para este tema, si la mayoría escucha a la oposición y quiere abrir un espacio de acuerdos para tener una ley como debe ser, concurriremos con toda disposición a una mesa de trabajo, y poderlo aprobar en dos semanas en el periodo ordinario”.
En su intervención, el emecista Noé Castañón pidió retirar el dictamen y apoyó la propuesta de instalar una mesa de trabajo plural. Asdemás, insistió en que la revocación de mandato es la pérdida de confianza de un gobernante y no su ratificación.
Posteriormente, el coordinador del PRD, Miguel Angel Mancera, señaló algunos errores del dictamen, e insistió en que la revocación de mandato se aplica en perjuicio del titular del Ejecutivo federal y no se habla de su ratificación.
“Un tema bien importante: la aplicación retroactiva de la ley. La figura de revocación de mandato obviamente aplica en perjuicio de la persona titular del Ejecutivo y hoy estanos haciendo una ley que va a aplicarse retroactivamente a un ejercicio que ya está iniciado. Si estuviéramos hablando del próximo ejercicio, pues no habría ahí mayor debate, pero estamos haciendo esta aplicación retroactiva, se tendrá que dejar claro en un transitorio o ¿cómo es qué lo vamos a plantear? ¿cómo lo vamos a ver?”, subrayó.
El coordinador de Movimiento Ciudadano, Dante Delgado, expresó: “la pregunta debe ser muy clara en los términos en los que la Constitución lo establece, no sé la razón, que no sea política, de obsequiarle al Presidente de la República una pregunta a modo, es poner su nombre, debe ser muy simple, como nosotros lo planteamos, la pregunta a los ciudadanos. Lo que tenemos que definir es el objetivo de la revocación, entendida como la voluntad de los ciudadanos, no se trata del actual, vamos a aprobar una ley reglamentaria que tendrá efectos para los próximos presidentes”.
En tanto, Morena, en voz del senador Félix Salgado Macedonio, demandó a la oposición aprobar el dictamen, pues mediante esta ley tienen la oportunidad de que el presidente Andrés Manuel López Obrador se vaya del poder.
“¡Alégrense! Deben aprobar esta propuesta sin regateo alguno. El asunto no es ni de fondo ni de forma, la pregunta es si se revoca o si continúa. No le busquen. La pregunta es bastante clara: ¿Estás de acuerdo en que Andrés Manuel López Obrador, presidente de los Estados Unidos Mexicanos, continúe ejerciendo el cargo hasta que concluya su mandato, ¿sí o no? Y ustedes le tienen miedo a esa respuesta y les da pavor”, subrayó.
LP