El contrabando en aduanas en México puede llegar a representar hasta tres por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), declaró el jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo.
Indicó que el gobierno federal "tiene un problema brutal con factureras, con aduanas y con empresas fantasma", tras participar en el Foro Nacional de la Industria Química.
El funcionario pidió tranquilidad a la iniciativa privada respecto a la reforma fiscal que equipara a 'factureros' con la delincuencia organizada, ya que la orden del gobierno federal es trabajar de la mano con empresarios para que no caigan en este tipo de conductas.
"No se asusten porque cuando nosotros, como empresarios, tenemos una factura por un año no es proble, pero si lo repetimos por siete pues ya no es accidente, es diseño", sentenció.
Sobre el flujo de trabajo con diversos sectores de la economía, agregó que no tiene duda de que las mesas de trabajo están funcionando para concientizar al gobierno federal de las necesidades de cada sector.
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En materia macroeconómica, Romo explicó que la línea a seguir se basa en cuatro puntos como subir la inversión pública y privada en el país, aumentar el contenido nacional de producción, reducir el déficit de mercancías que tiene México con todos los países, excepto Estados Unidos, así como impulsar el desarrollo económico de la región sur-sureste del país.
Aclaró que espera que el nuevo líder del sindicato petrolero "represente extraordinariamente a sus trabajadores, que realmente sea un sindicato libre y que trabaje por el bien de la empresa y los empleados", luego de la renuncia de Carlos Romero Deschamps.
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