Las Fuerzas Armadas arroparon a su comandanta. Y Claudia Sheinbaum Pardo, la primera en asumir el encargo, ofreció su respaldo, anunció que seguirán siendo convocados para la construcción de obras, que habrá una mayor inclusión de las mujeres, y prometió una mejora salarial para los uniformados.
El almirante secretario, Raymundo Pedro Morales, habló a nombre de los marinos mexicanos, celebró que Claudia Sheinbaum conduzca el timón del país, mientras que desde los ejércitos de tierra y aire, el general Ricardo Trevilla Trejo, hizo un llamado a la subordinación total al poder civil.
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En esta ceremonia histórica, que solo se ve cada seis años, pues se trata del primer pase de revista, sonaron 21 cañones, y fueron convocados cerca de seis mil uniformados, aeronaves, blindados, caballos y cadetes, apenas una muestra representativa de quienes se dedican a la seguridad interior o a las tareas de auxilio a la Población.
La presidenta, acompañada del almirante y el general, recorrieron las columnas a bordo de un vehículo todo terreno. Soldados, aéreos, marinos y guardias, hombres y mujeres perfectamente formados.
Hacia la continuidad de la transformación
En su discurso, el almirante Raymundo Pedro Morales, nuevo titular de la Secretaría de Marina, destacó el compromiso de la Armada de ayudar a la continuidad de la transformación.
“Las y los mexicanos han decidido tomar las riendas de la nación porque en una auténtica democracia sólo a ellos les corresponde hacer valer los encargos de la patria en esta nueva travesía hacia la continuidad de la transformación.
“La Armada de México ha sido convocada a sumarse una vez más a esta gran causa, por tanto habremos de trabajar en favor de los legítimos intereses del pueblo de México el bienestar y progreso del pueblo será el centro de todos nuestros esfuerzos”, declaró.
Se refirió a una armada “cercana, solidaria, honesta, institucional y altamente estratégica pero también como una armada que reafirma su irrestricto respeto a los derechos humanos”.
Ante un contingente representativo de las tropas y tripulaciones, manifestó “respeto y subordinación” para los retos del país.
“No hay desarrollo sin seguridad es el poder naval el garante para protegerlo con base en las capacidades de la armada”, enfatizó.
Subordinación total al poder civil
Le siguió el general secretario de la Defensa, Ricardo Trevilla Trejo, que habló a nombre de Soldados, pilotos y guardias. Reafirmó el compromiso con el pueblo de México y con la Presidenta.
“Subordinación total al poder civil, Ideal con el que seguiremos manteniendo el ímpetu y le interesa para afrontar los retos y desafíos que se presenten en este nuevo camino”.
Celebró la existencia de 47 mil mujeres en las Fuerzas Armadas, y destacó los retos para los próximos años en materia de inclusión; “Para que puedan ejercer el mando de tropas en todos los niveles y conduzcan por igual a hombres y mujeres en todas las actividades del quehacer militar”.
Tenga la certeza, declaró el Secretario, “el respaldo y la motivación plena para impulsar su proyecto de nación.
“Estamos convencidos que bajo su liderazgo y guía seguiremos contribuyendo al bienestar de los mexicanos, le refrendamos nuestro profundo respeto, nuestra firme lealtad y total disposición para caminar juntos con usted”, subrayó.
Seguir apoyando en la construcción de grandes proyectos
Fue el turno del discurso de Sheinbaum. La comandanta Suprema de las Fuerzas Armadas habló para los uniformados, de quienes dijo sentirse orgullosa de su tradición “civilista”, que siempre “han obedecido al mando civil como lo establece la Constitución política”.
Anunció que los convocará “para seguir apoyando en la construcción de grandes proyectos estratégicos”, como los trenes de pasajeros o los puertos.
“Van a seguir siendo tiempos de hazañas pacíficas del pueblo de México y sus Fuerzas Armadas”, dijo.
Se refirió a la reforma que integra la Guardia Nacional a la Sedena, y “para los que critican que esto es , dijo, “es totalmente falso”.
“En nuestro país no hay estado de excepción, no hay violaciones a los derechos humanos lo que hay es más democracia, más libertades y Estado de derecho”, enfatizó.
Y subrayó: Nunca emitiré orden alguna que vulnere el orden constitucional por los derechos humanos del pueblo de México.
Destacó que cada día más mujeres participan en todos los ámbitos y las Fuerzas Armadas no son la excepción; “que en esta nueva etapa de la transformación, nos tocará juntas y juntos seguir fortaleciendo la paz, la seguridad y atender siempre con humanismo, disciplina y valor los problemas que tengamos juntas y juntos”.
Finalmente, destacó un incremento a la percepciones de marinos y navales.
“Una reforma para garantizar el salario mínimo de maestras y maestros de educación básica, de médicos, enfermeras, de soldados, marinos y efectivos de la guardia nacional. Y que el salario mínimo de soldados, marinos efectivos de la guardia nacional sea equivalente de manera progresiva al salario promedio del Instituto Mexicano del seguro social”, enfatizó.
Concluyó con una felicitación para las familias de los uniformados; “como madre y abuela, como presidenta de la República, sé lo que significa también el sacrificio que las familias hacen por ustedes y por México”.
“Les digo a las familias, a sus madres a sus hijos, a sus hijas, que sepan que tienen hijos e hijas extraordinarias, grandiosos en las fuerzas armadas.
“Estamos viviendo tiempos virtuosos con fuerzas armadas humanistas visionarias y ejemplares”, concluyó.
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