El rector de la UNAM, Enrique Graue, propuso al Senado que los 50 millones de pesos donados por los legisladores se utilicen para apoyar a las enfermeras que atienden a pacientes con covid-19 y estudiantes que regresarán a la “nueva normalidad” sin recursos para tecnología.
“Hay una gran fragilidad todavía del grupo de las enfermeras, es de las cosas que podemos discutir, es probablemente parte de este donativo el ayudar a ellas que en alguna medida están y se sienten desprotegidas”, manifestó.
En tanto, Ricardo Monreal, presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado recordó que los recursos son parte de la austeridad que se aplicó en la Cámara Alta.
“Este donativo es producto del esfuerzo de todos los senadores, de todos los grupos parlamentarios. Es decir, es nuestro presupuesto, sin embargo, cancelamos viajes internacionales, cancelamos foros internacionales y nos introdujimos a un plan de austeridad duro, para poder ahorrar una cantidad importante y entregársela a la institución de salud y a la UNAM, lo que ya hemos hecho”, señaló.
En una video reunión, el rector de la máxima casa de estudios destacó que en este momento de la pandemia hay sectores que requieren de grandes necesidades para que el sistema de salud no colapse como el de las enfermeras.
“Hay que recordar que el grupo de la enfermería es aquel que está en contacto directo con los infectados. Son aquellos que atienden, les ayudan a veces a comer, cambian sus ropas, hacen sus camas y, bueno, están expuestas. Y, en ese sentido, creo que valdría la pena que algo que consideremos en conjunto sea apoyarlas”, destacó.
Consideró que vienen más retos: “el tema ahora de regresar gradualmente a la realidad de nuestra cotidianeidad universitaria va a ir cambiando y tendremos que generar acciones de limpieza, de sanitización y de enfrentar la nueva realidad, porque esto no va a ser sencillo ahora que regresemos pronto a las actividades escolares”.
Recordó que en la población de la UNAM, el 64 por ciento de las familias, el ingreso promedio es menor de dos salarios mínimos.
“Esto indica que muchos jóvenes no tienen acceso a la comunicación y a las tecnologías de la información y el aprendizaje. Tendremos que apoyarlos y algo que podríamos generar también como parte de este donativo, es proporcionarles los elementos tecnológicos para que su regreso sea lo más sencillo posible y sea lo más eficiente”, añadió.
Graue señaló que se ha trabajado en prácticamente todos los ámbitos del conocimiento como la coordinación de la investigación científica que ha generado modelos nuevos de respiradores, biosensores, nuevos hisopos, medios de transporte, pruebas virológicas para detectar el virus, y estamos en el trabajo de unas nuevas pruebas serológicas.
“Porque parte de lo que tendremos que hacer es confirmar, de alguna manera, que aquellos que regresen no estén o ya hayan sido expuestos y sean relativamente inmunes, dentro de lo que cabe, a esta gran pandemia, a este virus del covid-19”, dijo.
Al agradecer el donativo comentó que cualquiera que sea el destino que se determine, la universidad actuará con toda responsabilidad social y transparencia, y entregará las cuentas al Senado puntualmente y con claridad.