El grupo parlamentario del PAN en el Congreso de la Ciudad de México dijo estar dispuesto a ser un puente de comunicación entre el sector restaurantero y el gobierno de la Ciudad de México, para explorar más opciones de ayuda o financiamiento a negocios que están al filo de la quiebra por el semáforo rojo.
Por ello, el legislador panista, Jorge Triana, propuso ampliar la capacidad de ayuda económica, refinanciar a negocios que han bajado la cortina y darles un salario solidario a todos los trabajadores restauranteros.
“Van a iniciar el año sin empleo, sin seguridad alimentaria para sus familias ni ahorros e ingresos propios, una noticia muy mala para estas familias que dependen del ramo; fue miserable la ayuda que les ofreció el gobierno: una limosna para congelar la presión”, señaló.
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Ante el caso omiso de las autoridades locales para dar respuesta a las exigencias de sector, Triana dijo que es necesario ayudarlos para que no se pierdan las fuentes de empleo, ya que el pago único por 2 mil 200 pesos que les ofrece la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum sólo ayudaría a 100 mil personas.
La Cámara Nacional de la Industria Restaurantera registró 13 mil 500 establecimientos cerrados definitivamente por la pandemia tan sólo en la Ciudad de México y la Zona Metropolitana, esto, sumado a la falta de apoyos de sus respectivos gobiernos.
“Tan sólo la crisis sanitaria en varias ciudades del país ha eliminado más de 600 mil empleos, sin contar los pequeños restaurantes o fondas de barrio que también son lastimadas”, agregó.
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Puntualizó que la ciudad debe ser más sensible con los empresarios de restaurantes y para quienes también dependen de este sector, como son cocineros, meseros, valet valet parking, ayudantes, garroteros y personal de limpieza.
Añadió que faltan nueve días más para estar en condiciones de semáforo rojo en la capital, siendo éste un momento muy difícil para quienes subsisten de este ramo y 2 mil pesos para un mes no sirven de nada.
Finalmente expresó que se trata de una industria noble y que, de forma disciplinada, han sabido acatar las indicaciones de la autoridad bajo amenaza de clausura o retiro de licencia, sin embargo, la mejor manera de retribuirles, es apoyarlos para que sigan ofreciendo sus servicios.
mjsg