En América Latina y el Caribe es necesario vacunar a cerca de 500 millones de personas para poder controlar la pandemia, aseguró Carissa F. Etienne, directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Algunos países ya han empezado por los contratos directos con los productores, precisó Etienne tras recordar que el mecanismo Covax garantiza la vacuna a 47 países para proteger a sus poblaciones de riesgo, cuyas entregas serán en febrero.
Aclaró que la distribución a través de Covax está sujeta a la autorización de uso de emergencia de la OMS y a las cadenas de producción, por lo que se están explorando alternativas para apoyar a los países con menos recursos económicos.
Por ahora, abundó, se está garantizando la entrega de vacunas para proteger al 20 por ciento de la población de cada país, pero se está explorando la posibilidad de que las naciones con mayores ingresos apoyen al mecanismo Covax para cubrir el 60 o 70 por ciento restante y, con ello, lograr la inmunidad colectiva o de rebaño.
“Las vacunas no van a resolver nuestros problemas de la noche a la mañana, ni de inmediato. Tenemos que seguir haciendo todo lo posible para reducir la circulación del virus y para lograrlo tenemos que utilizar las medidas de salud pública comprobadas, que incluye usar cubrebocas, el distanciamiento social, lavarse las manos, evitar aglomeraciones fortalecer las medidas, identificando casos y haciendo la cuarentena”, añadió Etienne.
La directora de la OPS comentó que este es el llamado de la Organización a continuar con las medidas de salud mientras llegan las vacunas y “aun cuando se empiecen a dar, simultáneamente, tendremos que reforzar las medidas de salud pública”.
Al respecto, Jarbas Barbosa, subdirector de la OPS, precisó que en necesario vacunar contra covid-19 al 70 por ciento de la población para lograr la inmunidad colectiva, lo que significa aplicar el biológico a más de 500 millones de personas en Latinoamérica.
“No hablamos de días o de semanas, hablamos de meses, por lo que debemos seguir implementando las medidas de protección que ya conocemos. Estas medidas, conjuntamente con la vacunación, lograrán reducir la transmisión en el futuro cercano”, detalló.
En conferencia de prensa, la directora de la OPS informó que la semana pasada, se reportaron alrededor de 1.6 millones de nuevos casos de covid-19 en América, lo que representa casi la mitad de todos los nuevos casos a nivel mundial.
Sin embargo, después de un constante aumento en los casos y muertes por covid-19, “estamos comenzando a ver una mejora en las tendencias en algunos de los países más afectados”, entre los que incluyó a Estados Unidos y Brasil, y algunas señales positivas en Panamá, Costa Rica, Chile y Argentina; “esto es motivo de esperanza, pero aún no de celebración”, dijo.
El número de muertes por covid-19 continúa aumentando, una señal de que muchos sistemas de salud siguen abrumados, particularmente en lugares que soportan una gran carga de infecciones, como América Central, especialmente en Honduras, El Salvador y Guatemala, al igual que la región amazónica a lo largo de la frontera entre Brasil, Colombia y Perú.
- Te recomendamos Para finales del mes, OPS enviará lotes de vacunas anticovid a países Política
La transmisión de coronavirus es muy dinámica, pues afecta a países y subregiones de manera diferente. La transmisión aumenta cada vez que “bajamos la guardia y descuidamos las medidas preventivas que han demostrado limitar la propagación de este virus”, señaló.
Para la OPS, las variantes del covid-19 también son una preocupación, pero no un motivo de alarma. Cuanto más se propaga un virus, es más probable que surjan mutaciones de éste.
“No es de extrañar que un virus tan extendido como el covid-19, que circula por todo el mundo, haya dado lugar a la aparición de numerosas variantes desde el inicio de esta pandemia”, abundó Etienne.
Por ahora, las variantes ya se extendieron del lugar donde se detectaron por primera vez, como el Reino Unido, Brasil y Sudáfrica; aunque esperan que s cambien los nombres para evitar estigmatizar a los países. Las tres principales variantes circulan en 19 países de la región.
“La evidencia comienza a sugerir que algunas de estas variantes (…) pueden transmitirse más fácilmente de una persona a otra, acelerando el aumento de los casos de covid-19, por ello deben ser monitoreadas para detectar cómo se comporta y se propaga.
“Nuestra respuesta a la pandemia debe basarse en pruebas, no en especulaciones. Es por eso que la OPS trabaja en estrecha colaboración con algunos de los mejores científicos del mundo, y hay un destacado equipo de investigación que trabaja en lugares como Manaos y Brasil”, comentó.
La Red Regional de Vigilancia Genómica de la OPS ha aumentado nuestra capacidad de secuenciar muestras de virus en un 50 por ciento desde principios de este año. Al menos 11 países de la región pueden analizar muestras de virus y detectar la presencia de variantes, además, se cuenta con dos laboratorios de referencia, con sede en Chile y Brasil, que están recibiendo muestras virales.
“Hasta ahora, la evidencia sobre estas variantes no cambia los aspectos fundamentales de nuestra respuesta pandémica. Nuestras recomendaciones para prevenir este virus siguen siendo las mismas: mantener una vigilancia estricta, limitar las reuniones y practicar el distanciamiento social, la higiene y el uso de cubrebocas”, explicó.
LP