En México, NO es la primera vez que se intenta prohibir la comida chatarra; éste es el recuento

El gobierno de Claudia Sheinbaum impulsará una estrategia para erradicar la venta de alimentos y bebidas chatarras en las escuelas de México.

¿Cuántas veces la SEP ha intentado prohibir la comida chatarra en las escuelas de México? | Especial
Alejandra Sigala
Ciudad de México /

El gobierno de Claudia Sheinbaum se unirá a la lucha contra los llamados “alimentos chatarra” dentro de las escuelas del Sistema Educativo Nacional (SEN).

Mario Delgado, Secretario de Educación Pública (SEP), presentó la estrategia “Vida Saludable” en la conferencia del 21 de octubre del 2024. Una medida que, a diferencia de sus antecesoras de otros sexenios, aborda a todo el sistema educativo, “desde preescolar hasta universidades” en palabras de la coordinadora Liliana Bahena.

¿Adiós a la chatarra en el 2025?

Varios han sido los llamados de organizaciones civiles para prohibir la venta de comida chatarra en las escuelas, así como sancionar a los planteles que ignoran las normas ya establecidas como la del Artículo 75 de la Ley General de Educación— reformado en diciembre del 2023— o los “Lineamientos Generales para el Expendio y Distribución de Alimentos y Bebidas Preparados y Procesados en las Escuelas del Sistema Educativo Nacional” del 2014.

“Ya habían lineamientos, pero no tenían la fuerza suficiente. Y la realidad es que en la gran mayoría de las escuelas sigue prevaleciendo la venta de comida con poco valor nutricional”, declaró Delgado.
Varios gobiernos han intentado prohibir o disminuir la venta de comida chatarra en las escuelas | Monserrat Mata

A dichos esfuerzos se unieron, en septiembre del 2024 , los “Lineamientos para la Preparación, Distribución y Expendio de Alimentos y Bebidas Preparadas” dentro de las escuelas.

Y aunque su completa y obligatoria entrada en vigor está contemplada para el 29 de marzo del 2025, las acciones del gobierno de Claudia Sheinbaum serán a partir de aquella disposición promovida por Jorge Alcocer y Leticia Robles, ex secretarios de Salud y Educación respectivamente.

Entre sus puntos establece evitar la inclusión de verduras y frutas en almíbar, cereales con azúcares añadidos o edulcorantes (aun cuando no tengan los sellos del sistema de etiquetado), grasas saturadas, aceites, entre otros más. Asimismo incluye una propuesta de la conformación de desayunos, refrigerios y comidas escolares.

¿Pero qué otras estrategias se han impulsado en la pelea contra la obesidad infantil y la comida chatarra en México? Aquí te explicamos.

ANSA, el acuerdo de Calderón

Felipe Calderón reconoció que la pelea contra la obesidad y sobrepeso infantil era ambiciosa y difícil: desde fomentar mejores estilos de vida y promover la actividad física, hasta controlar la oferta de alimentos y bebidas chatarra en las cooperativas escolares.

Así, en enero del 2010 presentó el Acuerdo Nacional por la Salud Alimentaria (ANSA) con el cual— entre otros puntos— el gobierno buscaba regular “el expendio y distribución de alimentos” en las escuelas, así como supervisar los productos expendidos y evitar la venta de “alimentos y bebidas que no facilitan una alimentación correcta”.

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Alonso Lujambio, entonces secretario de Educación Pública, dejó en claro que la disposición hacia las comidas chatarras se llevaría a cabo “cabalmente” por el Gobierno Federal. Un acto que la asociación El Poder del Consumidor reconoció como “un buen inicio” en la lucha contra la obesidad, más no como la solución única a la problemática.

“Se requiere que esta medida sea parte de una política integral”, declaró su director Alejandro Calvillo, poniendo sobre la mesa otras acciones como la reforma al etiquetado, prohibición de la publicidad de comida chatarra, orientación alimentaria y promover el consumo de alimentos ofrecidos por pequeños productores locales.

Sin embargo, pocos meses después la Secretaría de Salud (Ssa) aclaró que el radar de dicha estrategia estaría principalmente en los alimentos preparados y no los industrializados, pues estos últimos sólo representan el 20% del consumo total del alumnado.

“Tenemos que hacer un gran cambio en cómo se preparan los alimentos, para que no se agreguen (...) grasas saturadas, colesterol, sal y azúcar añadida”, explicó el secretario José Ángel Córdova quien anteriormente rechazó la eliminación de “los pastelillos y las botanas” de los planteles escolares. “No queremos que se satanice ningún alimento”, acotó.

De ANSA a reforma educativa

Con la llegada de Enrique Peña Nieto al poder, y la promulgación de la Reforma Educativa, entró en vigor la “Estrategia Nacional para la Prevención y el Control del Sobrepeso, la Obesidad y las Diabetes”; la cual, a diferencia de la ANSA, sí dejó en claro la prohibición de “alimentos que no favorezcan la salud de los educandos”.

Con ello, en mayo del 2014 el presidente anunció la publicación de los “Lineamientos Generales para el Expendio y la Distribución de Alimentos y Bebidas Preparados y Procesados en las Escuelas”, cuya decimoctava disposición establecía:

“Queda prohibida la preparación, expendio y distribución de alimentos y bebidas (...) que por presentar una fuente de azúcares simples, harinas refinadas, grasas o sodio, no cumplan con los criterios nutrimentales (...) y, en consecuencia, no favorezcan la salud de los educandos y la pongan en riesgo”.

ASG


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