Autoridades de la Aeronáutica Civil de Cuba pidieron hoy a Estados Unidos que se pronuncie sobre el “acto de piratería” cometido por el piloto cubano Rubén Martínez Machado, quien el viernes se fugó al país norteamericano con un avión monomotor perteneciente a la Empresa Nacional de Servicios Aéreos
“Los actos de piratería aérea constituyen delitos tipificados en varios convenios internacionales, ratificados por Cuba y los Estados Unidos. Este hecho representa una violación del espacio aéreo, de la seguridad operacional y de las regulaciones aeronáuticas cubanas, en correspondencia con los Anexos del Convenio sobre Aviación Civil Internacional (Convenio de Chicago)”, puntualizó la protesta cubana.
Agregó que hasta el momento, Cuba no ha recibido notificación oficial de las Agencias de Estados Unidos.
“El viernes 21 de octubre de 2022, una aeronave del tipo AN-2, identificado con el vuelo CNI 400, matrícula CU A1885, perteneciente a la Empresa Nacional de Servicios Aéreos (ENSA), despegó de la Unidad Económica de Base de la ENSA de Sancti-Spíritus (centro), a las 07:00 horas, con destino a la pista El Cedro para realizar labores de fumigación agrícola”, informaron los cubanos.
Puntualizaron que “después de terminar su segundo vuelo de aplicación, la aeronave, piloteada por el capitán a bordo Rubén Martínez Machado, no regresó a la pista”.
En la nota se afirma que Martínez Machado, natural de la ciudad de Santa Clara (centro), disponía de la Licencia 3060, válida hasta el 30 de octubre 2022.
Por su parte, medios estadunidenses informaron que “el éxodo masivo desde Cuba tomó un giro inusual el viernes, cuando un piloto en un viejo avión de la era soviética despegó de la isla a solo 90 millas al sur de Cayo Hueso y aterrizó en algún lugar al oeste de Krome Avenue en los Everglades”.
Fugas de este tipo con fines migratorios han sido muy comunes en la isla, donde se recuerda, además, que un método similar empleó la inteligencia cubana para infiltrar a uno de sus agentes en medios anticastristas de Miami, la llamada “capital del exilio cubano” en Florida.
El agente en cuestión, René Gonzáles, formó parte de la denominada” Red Avispa”, desactivada por los servicios especiales de Estados Unidos en 1998. Gonzáles y sus compañeros cumplieron prisión en Estados Unidos y regresaron a la isla, tres de ellos como parte del deshielo entre Washington y La Habana en 2014.
LG