La presidenta Claudia Sheinbaum dio a conocer que el secretario de Relaciones Exteriores, Juan Ramón de la Fuente, viajará a Estados Unidos, para coordinar la estrategia legal que el gobierno de México aplicará desde sus consulados, ante posibles deportaciones masivas, con el regreso de Donald Trump al gobierno.
En la conferencia mañanera en Palacio Nacional, la mandataria informó que el canciller se reunirá con los cónsules para fortalecer el trabajo en estas representaciones. Explicó que se buscará que la atención a los connacionales sea más directa, se incremente el apoyo jurídico y disminuyan los trámites.
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“El trabajo de nuestros consulados, que está trabajando el canciller, de hecho tiene una gira muy pronto para ver a distintos cónsules en Estados Unidos, para trabajar que todas las áreas de los consulados estén dedicadas a atender a nuestros compatriotas del otro lado de la frontera.
“El fortalecimiento del trabajo de los consulados, la disminución de trámites, la digitalización, la atención personalizada, la atención más directa y también la parte jurídica, es cómo lo estamos fortaleciendo”, apuntó.
Sheinbaum Pardo agregó que su gobierno también se prepara para recibir a los mexicanos que posiblemente sean deportados en la próxima administración estadunidense de Donald Trump.
Desde el salón Tesorería, detalló que el plan lo coordinará la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, e incluirá a los gobernadores de los estados de la frontera norte del país.
“También prepararnos aquí, que también tenemos un plan que hemos estado trabajando, que lo coordina la Secretaria de Gobernación, vamos a hablar ya con los gobernadores de la frontera, porque si se llegan a dar estas deportaciones, nosotros tenemos que recibir bien a nuestros nacionales. Entonces estamos trabajando en todas las áreas”, resaltó.
La jefa del Ejecutivo federal sostuvo que su gobierno siempre defenderá a los mexicanos que contribuyen a la economía de Estados Unidos, desde los trabajadores de campo hasta los estudiantes de posgrado.
“Desde el trabajo en el campo, siete de cada 10 trabajadores agrícolas, o son mexicanos y nacidos en México, o son de segunda generación de mexicanos que se fueron en otro momento, no comería Estados Unidos si no fuera por las y los trabajadores del campo mexicanos.
“De igual manera, desde los trabajadores del campo que tienen una valía enorme y que son trabajadores de primera, hasta los estudiantes de posgrado que se quedaron a vivir allá que desarrollan patentes en los Estados Unidos, eso siempre lo vamos a defender, siempre lo vamos a mantener y siempre vamos a insistir que la mejor manera de atender la migración es atendiendo las causas”, añadió.
LP