Con la participación no presencial de siete de los nueve aspirantes a la presidencia municipal de Pachuca se llevó a cabo el debate organizado por el Instituto Electoral del Estado de Hidalgo (IEEH), en el que las denostaciones y los ataques fueron los vencedores en el ejercicio democrático.
La ausencia por cuestiones de salud del aspirante del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Isidro Pedraza Chávez; así como la negativa del abanderado de Acción Nacional (PAN) a debatir nuevamente con sus rivales –pues aseveró en conferencia de prensa previa que ya había asistido a otros ejercicios similares y que el único debate que se debe tener es con el Movimiento Regeneración Nacional (Morena)– mermó la participación en esta actividad.
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Por su parte la candidata del Partido Nueva Alianza Hidalgo (PNAH), Darina Márquez Uribe; así como los candidatos: del Revolucionario Institucional (PRI), Sergio Baños Rubio; Movimiento Ciudadano (MC), Rubén Muñoz Saucedo; candidatura común Juntos Haremos Historia en Hidalgo, Pablo Vargas González; Más por Hidalgo (MXH), con el suplente de Gustavo Ríos Rivera, Diego Neri Martínez; de Podemos, Jorge Conde Rivemar; y el independiente Ricardo Crespo Arroyo; en su mayoría dejaron ir la oportunidad de dar a conocer sus propuestas principales y se enfocaron a la denostación y a los ataques a sus similares.
Crespo Arroyo inició la ofensiva contra sus rivales al poner en entredicho la decisión de sus respectivos partidos para abanderarlos, sobre todo de Morena al seleccionar a Pablo Vargas, proceso que acusó fue definido por dedazo y que carece de respaldo ciudadano, así como de conocimiento y acercamiento con la realidad de la ciudad.
De igual forma desestimó las supuestas encuestas que lo posicionan en el primer puesto de la contienda, “no nos puede decir un candidato que va a luchar por la desigualdad cuando no la conoce, no más mentiras a lo pachuqueños; en las encuestas dicen que Pablo va hasta arriba y ni te conocen”.
A esta afirmación se sumó el abanderado del tricolor, Sergio Baños Rubio, que no solo desestimó los resultados de las encuestas, sino que también a las organizaciones que las llevaron a cabo, “pues ni siquiera están registradas, las que sí lo están saben que nosotros vamos arriba”, sentenció; además de que señaló que Morena en sus gobiernos únicamente ha reflejado pobreza y división, por lo que se comprometió a atender estos temas.
Por su parte la aspirante del partido turquesa, Darina Márquez Uribe, señaló que se debe generar una nueva forma de hacer política y calificó a los partidos PRI, PAN y Morena de estar ligados a la corrupción y a las malas condiciones que no solo se presentan en el municipio sino en todo el país, por lo que se debe acabar con “el priismo que no acaba de morir y de la pesadilla de Morena a nivela nacional, así como de los partidos embarrados de corrupción y divididos”.
En tanto el abanderado del partido naranja, Rubén Muñoz Saucedo, quien se había limitado en ocupar estas figuras de ataque a sus rivales, señaló que es lamentable que se utilicen estos recursos, pero también lanzó la acusación a los aspirantes que están destinando millones de pesos a su campaña “pues el que paga para llegar, llega para robar”; mientras que Diego Neri Martínez de MXH, consideró inviables las propuestas del abanderado del PRI en materia de empleo y adelantó que la inversión de más de dos mil millones de pesos que augura “habrá que analizarla, pues no se puede permitir que se venda el municipio a empresas para generar empleo como ya se ha hecho”.
Finalmente los candidatos que se abstuvieron en generar una disputa y mayor denostación fueron de Podemos, Jorge Conde Rivemar; y de la candidatura común Morena-PT-PVEM-PESH, Pablo Vargas González; sin embargo sus propuestas en los temas de: empleo, desarrollo sustentable, cultura y recreación, no generaron un contrapeso para competir con la denostación a otros temas y este último se limitó a exhortar a una opción diferente y no beneficiar a los políticos tradicionales