Morena va por la declaratoria de desaparición de poderes en Guanajuato y Tamaulipas, al enlistar para la sesión de este martes en el Senado la solicitud con el argumento de que los gobiernos panistas de Diego Sinhué Rodríguez y de Francisco Javier Cabeza de Vaca no pueden con la delincuencia en sus estados.
La bancada de Morena, que encabeza Ricardo Monreal, sostiene en su argumentación, que no se pueden permitir hechos como la ejecución extrajudicial ocurrida el pasado 5 de septiembre en Nuevo Laredo, Tamaulipas, o “el caos” que atenta contra la población de Guanajuato donde muere una persona cada dos o tres horas.
Las declaratorias se presentan horas después de que en el cónclave panista del pasado sábado, el ex presidente Vicente Fox dijo que buscarán un frente para “darle en la madre” a la Cuarta Transformación.
Por lo que toca a Guanajuato, Morena acusa que el actual gobierno encabezado por Diego Sinhué Rodríguez, ha dejado de manifiesto la incapacidad de preservar la seguridad pública y jurídica de la población, así como la permanencia y funcionamiento normal de las propias instituciones de la Entidad y de quienes las dirigen.
“Lo cual es muestra de que el orden Constitucional se ha quebrantado y no es posible que continúen en funciones los poderes de dicha entidad”.
Se da cuenta la violencia reflejada en los medios informativos, para señalar que hay una crisis de inseguridad en un estado que antes era tranquilo, “pero ahora se debate en el caos y la ausencia de orden jurídico que no permiten a sus pobladores realizar sus actividades de manera normal, vaya, ni siquiera de preservar su integridad personal”.
Morena considera que se actualizan los supuestos previstos en el artículo 2º de la Ley Reglamentaria de la Fracción V del Artículo 76 de la Constitución General de la República y, por ende, se debe declarar que es procedente designar un gobernador provisional en el Estado de Guanajuato, conforme al procedimiento instituido en dicha normativa reglamentaria.
Se configuraría el supuesto de quebrantar los principios del régimen federal, abandono de ejercicio de sus funciones, la plena vigencia del orden jurídico, entre otros.
Por lo que toca a Tamaulipas, Morena señala que la tasa de los índices delictivos aumentó de manera inmensa desde que en 2016 Francisco Javier García Cabeza de Vaca asumió su mandato como Gobernador del estado.
De acuerdo con datos proporcionados por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública sólo durante su primer año de gobierno la tasa señalada se elevó de 16.60 a 22.11.
“Actualmente, Tamaulipas es una de las entidades federativas más violentas del país donde sus habitantes se encuentran en un estado de vulnerabilidad sin precedentes debido a que, por un lado, deben enfrentar los estragos causados por el crimen organizado, y por el otro, están expuestos frente a los cuerpos de seguridad que las autoridades estatales utilizan de manera injustificada para reprimirlos, esto a travédel indebido uso de la fuerza y de malas prácticas policiales que son empleadas en nombre de fallidas estrategias de seguridad”.
Y el Senado de la Republica no puede obviar la alarmante situación en la que García Cabeza de Vaca ha sumergido al estado, “menos cuando tenemos ante nosotros un caso de ejecución extrajudicial, en nuestro país no podemos permitir las violaciones graves a los derechos humanos”.