El pleno de la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad la Ley Federal para el Fomento y Protección del Maíz Nativo, pero con modificaciones al proyecto originalmente avalado por el Senado, a fin de evitar afectaciones a los productores de maíces híbridos y garantizar la seguridad alimentaria del país.
Avalado con 270 votos, el dictamen prevé declarar la protección del maíz nativo en cuanto a su producción, comercialización y consumo como una obligación del Estado.
El nuevo ordenamiento fue devuelto al Senado para el análisis y votación de las modificaciones aprobadas este miércoles en San Lázaro.
De acuerdo con las consideraciones del dictamen, “el objeto de esta ley no es la regulación de los organismos genéticamente modificados, ni se prohíben esas técnicas, sino establece la garantía de protección del Estado al maíz nativo frente a éstos”.
Según el Consejo Nacional Agropecuario y organizaciones de productores, la prohibición de maíces híbridos y genéticamente mejorados habría puesto en riesgo la seguridad alimentaria de México y provocado el alza de precio de la tortilla hasta 60 pesos por kilo.
Entre otros aspectos, la ley considera la creación del Consejo Nacional del Maíz Nativo como un órgano de consulta del Ejecutivo para emitir opiniones en materia de protección a las semillas nativas, con la participación de representantes de las secretarías de Agricultura, Medio Ambiente y Cultura, así como del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, sociedad civil, ejidos, comunidades agrarias y comunidades indígenas.
Establece además los bancos comunitarios de semillas de maíz nativo para su administración y preservación colectiva para su producción mediante sistemas tradicionales.
Con información de Elia Castillo
jlmr