Tras decretar un receso de más de una hora y al no llegar a un acuerdo entre el PRI y el PAN, el pleno del Congreso local acordó bajar del análisis y aprobación la nueva Ley de Residuos de Nuevo León que, entre otras cosas, buscaba privatizar la recolección de basura.
Durante más de una hora y media fue leída de manera integra la Ley que impulsó el PAN y que se aprobó en octubre de 2022 en la Comisión de Medioambiente, sin embargo, ante la amenaza de trabajadores de SIMEPRODE de presuntamente vaciar 15 camiones de desechos en los alrededores del Legislativo, se fueron a receso.
En el transcurso del receso se observó a Carlos de la Fuente, líder del PAN, a Itzel Castillo, presidenta de Medioambiente y a Heriberto Treviño del PRI, quienes por más de 20 minutos analizaron la situación de manera pacífica.
De acuerdo con una ficha técnica de la Ley de Residuos, SIMEPRODE no se contempla como autoridad para aplicar la Ley.
“El Ejecutivo no puede establecer convenios con SIMEPRODE como lo hace hoy en día al operar los rellenos municipales.
“El municipio solo puede concesionar con privados la gestión de residuos, dejando fuera a SIMEPRODE. No Establece que instalaciones e inversiones que se han realizado en SIMEPRODE”, se lee.
Por su parte, el legislador Javier Caballero, del PRI, pidió bajar el asunto.
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