Tras sostener una reunión con vecinos del distrito local 10, el candidato a la gubernatura por el PRI, Enrique Doger Guerrero, se comprometió a reducir los costos del servicio de agua potable y realizar obras en las colonias populares.
Desde un ring, Doger sostuvo que el grupo en “el poder” forma parte de “los rudos”, mismos que poco hicieron por las colonias populares y no encabezaron un gobierno cercano a la gente que viera por sus necesidades más sensibles de los ciudadanos, como el acceso a los servicios públicos y la seguridad.
“Nunca se acordaron de las colonias populares, por eso el transporte es malo ¿les sirve la RUTA? claro que no, queremos un transporte barato, limpio, seguro, porque los rudos lo hicieron mal en Puebla, descuidaron la seguridad y la gente vive insegura, aumentaron los robos, los asaltos, los asesinatos y no queremos más dificultades”, apuntó.
Afirmó que esta pelea “la ganarán los técnicos, porque saben lo que la gente necesita, sobre todo los grupos más desprotegidos”, como las mujeres, los adultos mayores y los ciudadanos con carencias.
“Necesitamos un gobierno cercano a la gente, que no haga obras que no le sirven a nadie, más que a sus negocios; necesitamos obras que la gente necesita, el transporte público para la gente, agua potable barata, no cara, necesitamos dar más apoyo a las mujeres, más empleos y bien pagados”, señaló.
En el evento realizado en la colonia La Loma, Enrique Doger exhortó a sus simpatizantes a dar la batalla no sólo para ganar la gubernatura, sino todos los cargos locales y también llevar a la Presidencia de la República a José Antonio Meade.
En entrevista posterior al evento con la militancia, el candidato aseguró que está preparado para el debate del próximo 11 de junio y la “pelea en el ring” fue apenas un ensayo del papel que tendrá ante sus adversarios.
Por otra parte, el abanderado apuntó que el Instituto Nacional Electoral (INE) se convirtió en un instrumento de censura, una vez que en las últimas semanas determinó que se suspendieran tres de sus spots. Al mismo tiempo, negó que los audiovisuales violen la norma y que señalen situaciones que la gente desconoce, como la “continuidad” y el “enriquecimiento” de Miguel Barbosa.