El Presidente pide negar palancas a sus familiares

Memorando. Advierte a su gabinete y a servidores públicos que “no tienen obligación de escuchar propuestas indecorosas”.

El presidente Andrés Manuel López Obrador conmemoró el 80 aniversario del exilio español en México. (Javier Ríos)
Jannet López
Ciudad de México /

El presidente Andrés Manuel López Obrador giró un memorando para los funcionarios federales en el que les pide evitar el influyentismo, el amiguismo y el nepotismo, por lo que ninguno de sus familiares puede hacer propuestas ni acuerdos en nombre del gobierno.

“Esto incluye a mi esposa, hijos, hermanos, hermana, primos, tíos, cuñados, nueras, concuños y demás miembros de mi familia cercana o distante. Ustedes no tienen la obligación de escuchar propuestas indecorosas de nadie. Y en el caso de mis familiares, ni siquiera recibirlos en sus oficinas o contestarles el teléfono. Nada de nada”, dice el escrito.

Luego de que el pasado 3 de junio el tabasqueño dijo en la mañanera que estaba preparando este documento, ayer lo envió a los secretarios de Estado, directores de empresas y organismos paraestatales, y servidores públicos en general.

“No acepto, bajo ninguna circunstancia, que miembros de mi familia hagan gestiones, trámites o lleven a cabo negocios con el gobierno en su beneficio o a favor de sus 'recomendados'”, advirtió.

El texto de seis párrafos subraya que todos los servidores públicos están obligados a honrar la palabra y cumplir el compromiso de no mentir, no robar y no traicionar la confianza de los mexicanos.

Concluye advirtiendo que, “de no cumplirse esta recomendación, se puede caer en actos de deshonestidad y en la esfera del derecho penal”.

Hace 10 días, López Obrador insistió en que no responderá por malas acciones o irregularidades que pretendan cometer sus compañeros de lucha, amigos o incluso su familia: “No tengo esposa, no tengo hijos, no tengo amigos, solo respondo por mi hijo menor, Jesús Ernesto”.

“EL ASILO ES SAGRADO”

El mandatario aseguró que sigue el ejemplo del ex presidente Lázaro Cárdenas y que, así como hace 80 años se dio asilo a miles de españoles, esta administración preservará ese derecho y abrirá sus puertas a los migrantes y a todo aquel que “busque mejores condiciones de vida” .

Ayer encabezó el 80 aniversario del exilio español en Palacio Nacional, donde enfatizó “este derecho ya quedó sembrado en la política exterior de México, tenemos que garantizarlo, es sagrado para todos los mexicanos”. Reiteró que en esta situación que atraviesa el país mantendrá el respeto al gobierno de Estados Unidos y a su presidente.

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